De acuerdo con estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el último año se han registrado siete mil 295 carpetas de investigación por el delito de fraude
Este 2022 figuró por las empresas financieras que fraudaron a sus clientes con millones de pesos, y que ocasionaron que las denuncias por este delito crecieran en comparación con años anteriores.
De acuerdo con estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el último año se han registrado siete mil 295 carpetas de investigación por el delito de fraude entre enero y octubre de 2022, casi mil más que las iniciadas en el mismo periodo de 2021, cuando se abrieron seis mil 342 denuncias. ¿Pero, cuáles son las empresas señaladas por fraudar a miles de clientes?
Fue en agosto pasado cuando se dio el primer caso y uno de los más grandes: Luis Oswaldo, a cargo de la presunta financiera AJP, había dejado de pagar los intereses de por arriba del 10% a miles de personas que habían hecho grandes inversiones, incluso por arriba de los seis ceros, ocasionando que el problema llegara hasta los medios de comunicación y la Fiscalía del Estado.
Ante la presión, Luis Oswaldo quitó las oficinas que tenía en varias partes de la Metrópoli, entre ellas la que tenía en la colonia Providencia, atentó contra su vida, y de los supuestos socios y colaboradores nada se sabe.
Según el último corte del Gobierno de Jalisco al 23 de diciembre eran mil 234 las víctimas afectadas quienes decidieron denunciar, alcanzando un monto que supera los mil millones pesos. Sin embargo, se habla que hay miles de afectados más quienes decidieron no presentar sus querellas por temas personales.
Apenas el pasado viernes se dio a conocer sobre la detención de un hombre que podría tener relación financiera con AJP.
Se trata de Manuel “M”, quien de acuerdo con las investigaciones, el 8 de marzo del año 2021, firmó un contrato de inversión con la referida compañía “a favor” del denunciante, en un domicilio ubicado en la colonia Ladrón de Guevara en Guadalajara, donde hizo entrega de la cantidad de 100 mil pesos, y posteriormente otra de 200 mil.
La segunda ola de “Green Oceans”
Solo un par de semanas después y en el mismo mes de agosto se dio a conocer el fraude de la empresa Green Oceans, la cual invitaba a sus víctimas a invertir con la promesa de alcanzar hasta 20% de intereses mensuales.
Fueron al menos 600 víctimas quienes decidieron sí denunciar, alcanzando afectaciones que superan los 800 millones de pesos, aunque se estima podrían superar los mil 500 afectados.
Apenas el miércoles pasado la Fiscalía del Estado informó sobre la captura de Alejandro “A”, a quien se le señala de ser el propietario de dicha financiera, por lo que fue puesto a disposición de un juez e imputado por el agente del Ministerio Público durante la audiencia inicial que se realizó este día.
Según la dependencia estatal, Alejandro “A”, quien contaba con un mandato judicial por el delito de fraude, por los hechos registrados en el año 2020, cuando el detenido dirigía una empresa que ofrecía membresías al parecer con la modalidad de invertir y redituar el 20% luego de seis meses.
El ofendido abrió una cuenta por 452 mil pesos, y al llegar la fecha establecida para recibir lo prometido no recibió el dinero, incumpliendo lo acordado por Diego Alejandro “A”.
Creso, la más reciente
Fue a inicios de este mes cuando se dio el caso de CRESO, otra presunta financiera que fraudó a sus clientes con la promesa de entregarles al menos 7% de interés al invertir su dinero.
Se habla que son al menos 600 las personas afectadas, con un monto aproximado a los 800 millones de pesos en capital. Por este caso aun no hay personas detenidas.
Todos estos casos operaban bajo el sistema Ponzi, que consiste en un fraude mediante el cual los estafadores consiguen pagar los intereses de una inversión mediante el mismo dinero invertido o con el dinero de nuevos inversores.
En un sistema Ponzi una persona (física o jurídica) ofrece gran rentabilidad a las personas que invierten, gracias a lo que consigue fácilmente convencer a la gente para que se le preste capital para ser invertido. Los intereses del dinero depositado o prestado son pagados con el dinero que invierten los nuevos clientes.
El esquema funciona hasta que deja de entrar dinero. En ese momento se desmonta el entramado que deja a los estafados sin el ahorro que habían invertido.
Por ello se recomienda evitar confiar en las altas rentabilidades que estas presuntas empresas ofrecen al invertir el dinero, además de que, las personas interesadas en adquirir un préstamo o inversión pueden corroborar que la institución financiera esté registrada en el Sistema de Registro de Prestadores de Servicios Financieros de la Condusef en la liga: https://webapps.condusef.gob.mx/SIPRES/jsp/pub/index.jsp donde podrá verificar su domicilio, página de internet y teléfonos.