Integrantes de la LXIII Legislatura y los distintos partidos políticos representados en la Cámara, recordaron los hechos acontecidos el 02 de octubre en Tlatelolco hace 50 años, y se pronunciaron en tribuna al respecto.
La primera en hacerlo, fue la diputada Jesús Angélica Díaz Quiñonez (PAS), quien dijo que el movimiento del 68 heredó a los mexicanos libertad, pluralidad, conciencia crítica y tolerancia, además de que se trató de un evento que debe de estudiarse a fondo para que el país se reconcilie con su pasado y fortalezca el compromiso de asegurar los derechos humanos.
Posteriormente, el diputado Eleno Flores Gámez (PT), señaló que sin duda uno de los principales objetivos de la lucha de quienes resultaron masacrados en 1968 era el de tener un peso específico en la toma de decisiones frente al gobierno, por lo que se les debe de rendir un sentido tributo y refrendar el compromiso de trabajar por el pueblo durante el tiempo que dure su encargo como diputado.
Más adelante, el coordinador del grupo parlamentario del PRI, Sergio Jacobo Gutiérrez, indicó que desde el instituto político al que pertenece, se censura el desafortunado uso de la fuerza pública y la represión en contra de los estudiantes universitarios y politécnicos que murieron hace 50 años en Tlatelolco, destacó la importancia de mantener viva la memoria histórica y el legado del movimiento estudiantil de 1968, que tuvo un gran impacto en la transformación de la vida pública, toda vez que se trató de una generación que pacíficamente exigió espacios para sus sueños y esperanzas, y cuyos reclamos se enfrentaron con la cerrazón del poder y terminaron en un lamentable baño de sangre.
Mientras tanto, la diputada Graciela Domínguez Nava, coordinadora parlamentaria de MORENA, dijo que hace 50 años la juventud mexicana hizo de la calle una trinchera, una trinchera por un México democrático, porque eran democracia y libertad las exigencias de los estudiantes y de otros sectores a los cuales el gobierno respondió con balas y cárcel, derramando sangre de innumerables jóvenes, “el 02 de octubre no se olvida, y ahora, en las urnas, se reitera vivo”, expresó.
Agregó que “el movimiento del 68 recogió el viejo clamor de las luchas sociales, las sintetiza en seis puntos de su pliego petitorio y, a la vez, inaugura una nueva época de la lucha política: la lucha por un México con justicia y un Estado Social de Derecho, democrático, movimiento que data desde hace 50 años, y ahora anhelo convertido en triunfo político el pasado primero de julio”.
Cabe destacar, que durante esta sesión, el diputado Marco César Almaral Rodríguez, presidente de la Mesa Directiva solicitó ponerse de pie y brindar un minuto de aplausos a las víctimas de aquel 02 de octubre de 1968, situación que fue respaldada por la totalidad de los diputados y el público presente.