La Presidenta anuncia que Francisco Garduño seguirá en el cargo hasta diciembre; activistas celebran salida de “agente de la muerte”; no sabemos qué esperar del mandatario, dicen

Al concluir su actual cargo como gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes asumirá la titularidad del Instituto Nacional de Migración (INM). En conferencia de prensa, la Presidenta Claudia Sheinbaum anunció que Francisco Garduño se mantendrá los próximos meses a la cabeza del organismo para no romper la estrategia y también para esperar a que el mandatario concluya su gestión en diciembre.

“Ya, él (Salomón) se está involucrando y en lo que viene la transición se queda Francisco Garduño para no romper el trabajo que se está haciendo y ya en diciembre tomaría Sergio ese puesto”, declaró.

El 12 de agosto, días antes de asumir el máximo cargo, anunció que todos los gobernadores afines a la Cuarta Transformación y que en este año culminan su encargo tendrían lugar en su gabinete.

Sobre el cambio, activistas consideraron que Garduño se va del INM con graves pendientes en temas de corrupción interna, contención, gastos innecesarios y con una investigación penal en su contra, mientras que al futuro titular, Céspedes Peregrina, nadie lo conoce, ni sabe si tiene algún entendimiento del tema migratorio.

En entrevista con La Razón, Irineo Mujica, director de Pueblo sin Fronteras, calificó a Francisco Garduño como “ángel de la muerte”, debido a la ola de violencia contra los extranjeros que dejó en su administración.

“Que bueno que se va Garduño, se va un agente de la muerte, ya que se lleva muchos muertos. A este personaje (Céspedes) nadie lo conoce, sólo que fue gobernador, pero nada más, pero seguramente no sabe nada de migración. Me cuesta mucho pensar que esta persona pueda tener una política propia, de desarrollo”, explicó.

Señaló que lo único que se conoce del mandatario poblano es que ha sido diputado, pero cambiando de partido en cada elección, por lo que no ve a una persona seria y comprometida, además, indicó que el gran reto es cómo coordinar una política pública que beneficie a México sin la intromisión de Estados Unidos.

Graciela Zamudio, vocera de la organización Alma Migrante, aseguró a este diario que los retos en migración son los protocolos al interior de los aeropuertos, las normas de expulsión que son violatorias de derechos humanos, ya que sólo los dejan en las fronteras “a su suerte”, así como independizar la labor de la Guardia Nacional en el tema.

“Parece que esta nueva persona no tiene experiencia en el tema migratorio, ya que de alguna forma lo conoceríamos, porque la imagen que tenemos del instituto es terrible, ya que es carente de confianza y, por el contrario, es conocida por ser discriminatoria y violatoria de derechos humanos”, explicó.

Señaló que la nueva meta debe ser recuperar la imagen del INM, pues a lo largo de los años ha ido en decremento por la contención que tiene desde 2018: “Tiene demasiados negativos la institución, pero creo que el principal problema es que en la normatividad no hay un mecanismo de justicia, ya que el instituto es el principal lugar de impunidad”.

Mauro Pérez, expresidente del Consejo Consultivo del INM, aseguró que ha preguntado en Puebla, en las arquidiócesis que trabajan en el tema migratorio, pero nadie conoce a Céspedes en la labor, lo que deja cierta preocupación, aunque aclaró que es necesario esperar sus acciones.

Sobre Garduño dijo que “es increíble” cómo se pudo sostener en el cargo con una investigación en su contra, además que deja a la institución sin ninguna credibilidad: “Con todo lo que pasó en Ciudad Juárez debió haber renunciado para que la investigación fuera más transparente, además que deja una imagen de militarismo y contención”.