El presidente dijo que si los trabajadores del Poder Judicial quieren irse a paro el día 19, como anunciaron, que están en su derecho
El presidente Andrés Manuel López Obrador minimizó en su conferencia matutina el amago de trabajadores del Poder Judicial de irse a paro como medida de presión en contra de la reforma judicial, y dijo estar de acuerdo porque están en su derecho.
“Si van a hacer la huelga el 19, pues nada más les encargaría yo, con todo respeto, ahí tienen guardados dos expedientes como de 35 mil millones de pesos que ya deberían de resolverlos. La presidenta, la señora Norma Piña los tiene ahí en su escritorio, que ya libere ese asunto y ya que se vaya a la huelga”, agregó.
El mandatario cuestionó “por qué no quieren que se democratice el Poder Judicial” y detalló que “ahora están hablando jueces, magistrados, ministros, de que van a hacer una huelga el día 19, hay quienes sostienen que no pueden hacerlo legalmente, yo digo que sí, están en sus derecho, somos libres”.
Narró que “ahora estuve en Tepic, trabajadores del Poder Judicial de base, me tocó hablar con ellos y les dije ‘a ustedes qué les preocupa si ustedes hasta se van a beneficiar porque no es en contra de ustedes, es acabar con los privilegios de los de arriba, tú ganas 10 veces menos que lo que gana un juez, un ministro, que no te utilicen nada más'”.
López Obrador minimizó las consecuencias que tendría el paro que el martes adelantó la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed), que se opone a la reforma constitucional que el oficialismo votaría en el Congreso en septiembre.
La agrupación de trabajadores advirtió de que la elección popular de jueces afectaría la carrera judicial y, “sin duda alguna, abriría la posibilidad de que grupos de poder, incluso ilegales, ejerzan presión efectiva sobre los poderes judiciales”.
Pero el presidente insistió en que la reforma busca erradicar la corrupción de la cúpula del Poder Judicial, que “está al servicio de minorías, de grupos de intereses creados, es un apéndice del poder económico del país”.
El mandatario ironizó que con la huelga acabarían “los sabadazos”, es decir, liberaciones polémicas de
presuntos criminales que ocurren los sábados, como la orden de excarcelación este fin de semana del exgobernador del estado de Puebla, Mario Marín, acusado de torturar a la periodista Lydia Cacho.
Con información de EFE