López Obrador aseveró que el Poder Judicial está podrido y dominado por la corrupción, razón por la cual urge reformarlo
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseveró que están equivocados aquellos que piensan que se va a dar marcha atrás en reformar el Poder Judicial solo por el nerviosismo financiero que existe en la actualidad.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador aseveró que el Poder Judicial está podrido y dominado por la corrupción, y que reformarlo ayudará al país en el mediano y largo plazo.
Se puede avanzar si no hay corrupción, por eso están equivocados, lo digo de manera respetuosa, quienes están pensando que vamos a dar marcha atrás al propósito de reformar el Poder Judicial que está podrido, que está dominado por la corrupción, solo porque hay nerviosismo financiero, no”, expuso
“Sabemos que si limpiamos el Poder Judicial, en el supuesto de que tengamos desajustes en la paridad, a mediana y largo plazo eso nos va a ayudar a todos, pero además está de por medio la justicia, ¿cómo vamos a cambiar corrupción por justicia, qué les pasa? Si el éxito de nuestra política económica ha sido precisamente no permitir la corrupción”, indicó.
El mandatario mexicano apuntó que no se pueden quedar con los brazos cruzados, razón por la cual los jueces, magistrados y ministros deben ser elegidos por el pueblo.
“¿Por qué le tienen miedo al pueblo? ¿Por qué le tienen miedo a la democracia? Porque los nombra la cúpula del poder político o económico. ¿A quiénes les sirven los jueces magistrados y ministros? A la minoría, qué les va a importar el pueblo. No hay justicia para el que no tienen con qué comprar su inocencia y es muy claro”, enfatizó.
“Yo quiero, como todos los mexicanos, que los jueces, magistrados y ministros sean empleados del pueblo, el soberano es el pueblo, es el que manda, nosotros somos servidores públicos, eso es todo”, lanzó.
López Obrador quiere acelerar la aprobación de la reforma, que permitiría elegir por voto popular a jueces, a magistrados electorales y a la Suprema Corte, una vez que su alianza de partidos tenga el 1 de septiembre la mayoría calificada, de dos tercios del Congreso, necesaria para modificar la Constitución.
La reforma del Poder Judicial es la iniciativa de López Obrador que mayor nerviosismo causa en los mercados y el peso mexicano se depreció más del 8 por ciento la semana pasada tras los resultados de las elecciones del 2 de junio.
Los analistas anticipaban la victoria de la candidata morenista Claudia Sheinbaum, quien ganó con casi un 60 por ciento de los votos, pero no preveían que su alianza de partidos obtuviese una mayoría de dos tercios en el Congreso, con lo que podrían reformar la Constitución sin negociar con la oposición.
Con información de López-Dóriga Digital