En el maravilloso mundo de la política, nos encontramos con una amplia gama de personajes: desde rateros hasta sinvergüenzas, pasando por cínicos, mentirosos, simuladores, hipócritas y expertos en doble moral. Pero de vez en cuando, nos topamos con alguien que, sorprendentemente, es bueno en lo que hace. Y eso es exactamente lo que está sucediendo con Beatriz Paredes Rangel, a quien todos subestimaron en su enfrentamiento contra el fenómeno mediático de Xóchitl Gálvez. ¡Qué equivocados estábamos!
El proceso interno parecía ir según lo planeado: Xóchitl Gálvez se perfilaba como la candidata imbatible y, para darle un toque de legitimidad, se llevó a cabo un proceso interno en el que varios aspirantes fueron eliminados. Primero, aquellos que ingenuamente pensaron que el proceso era real y no solo un trámite. Luego, el priista Enrique de la Madrid yal último quedaron dos panistas y Beatriz Paredes. Pero, oh sorpresa, la señora Paredes resultó ser más astuta de lo que todos creían.
Desde el inicio de la contienda, Beatriz Paredes demostró ser un contendiente formidable. No solo cumplió con el requisito de recolectar firmas, activando lo que queda de la CNC, de la cual fue líder, sino que también sus eventos eran todo un éxito y su discurso, cautivador. Y cómo no iba a ser así, si la señora Paredes tiene una trayectoria política tan extensa que podría rivalizar con la de un político profesional. Antes de llegar a esta contienda, pasó por diputaciones locales y federales, fue senadora, presidió gubernaturay lideró su partido. ¡Vaya currículum!
Beatriz Paredes es implacable en sus discursos y, sobre todo, en los debates. Fundamenta cada palabra que dice y es respetada tanto por los movimientos priistas como por los no priistas. A diferencia de Gálvez, quien llegó gracias a un pleito, Paredes ha demostrado tener experiencia y conocimiento en diversos ámbitos. Mientras una candidata habla de micheladas, ella habla y da números sobre cómo rescatar a México. Mientras una se basa en las mañaneras, la otra habla de la falta de apoyo al campo, a la pesca y a la población en general. ¡Vaya diferencia!
Todo esto, ha provocado una reacción en el equipo de Xóchitl Gálvez, quienes en los últimos días han iniciado una batalla contra Beatriz Paredes. Pero, sinceramente, no parece que esto le quite el sueño a Paredes, quien entra a cada evento como si estuviera en una montaña rusa eléctrica. ¡Qué emoción!
Beatriz Paredes está complicando las cosas para aquellos que veían en Gálvez a la nueva esperanza. Solo esperemos que esto no vuelva a sorprender a los integrantes de ese movimiento, ya que en cada elección llegan a puestos cada vez menos relevantes. ¡Qué pena!
GGV
En fin, la política siempre nos sorprende con sus giros inesperados. Y Beatriz Paredes es la prueba viviente de que no debemos subestimar a nadie en este circo llamado política. ¡Que siga el espectáculo!