Apreciada Comunidad Universitaria;
Respetada Sociedad Sinaloense:
Desde la sala de protocolos de rectoría, y teniendo como fondo la imagen del General Francisco Villa, Revolucionario de quien este año se conmemora el centenario luctuoso, me dirijo ante ustedes para reiterar que la Universidad Autónoma de Sinaloa es una institución cuya agenda está concentrada en el trabajo académico, en la transparencia y en la construcción de un futuro mejor para todas y todos, a través de una formación integral de excelencia.
Somos una casa de estudios que siempre ha defendido la Autonomía Universitaria como el pilar fundamental de nuestro quehacer académico. Es por ello que hacemos público nuestro rechazo ante la reciente aprobación de la Ley de Educación Superior del Estado de Sinaloa, pues viola flagrantemente la Autonomía Universitaria, principio que había sido garantizado de forma contundente por la Ley General de Educación Superior, vigente a nivel nacional desde abril de 2021.
En torno al proceso de homologación de la Ley de Educación Superior, se llevó a cabo un ejercicio de consulta que resultó una simulación, pues al final se agregaron aspectos que nunca fueron discutidos públicamente.
Es oportuno mencionar que antes, durante y después de la aprobación de la Ley por parte del Honorable Congreso del Estado, sí se estableció comunicación con el Gobernador del Estado, haciéndosele llegar una propuesta de adecuación a través del Doctor Luciano Concheiro Bórquez, subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública, en el sentido de continuar protegiendo la Autonomía Universitaria.
La transparencia y la rendición de cuentas son acciones que de manera muy abierta y cotidiana realiza la Institución, desde la acreditación de programas educativos que son evaluados por organismos externos avalados por COPAES y que dan cuenta de la calidad de los egresados y del cumplimiento de las funciones institucionales.
Las auditorías a la matrícula que hoy en día realizan los pares de las universidades y que reflejan la objetividad y la confiabilidad de la información, las auditorías internas y externas a los procesos administrativos que son realizadas por Organismos reconocidos a nivel mundial, y las auditorías financieras que cada año realiza la Auditoría Superior de la Federación a la Cuenta Pública de la Universidad y que considera en su revisión la Aportación Estatal debido a que dicha aportación tiene su origen en las Participaciones Federales, así como los recursos federales que se han ejercido, recursos del Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM), todas estas revisiones en el debido cumplimiento con la normatividad en la materia y la Ley de Disciplina Financiera.
Como parte de estos procesos de rendición de cuentas, se publican en los portales de transparencia, en la armonización contable, las Cuentas Públicas de la Universidad, los informes trimestrales del Presupuesto de Egresos de la Federación que además se entregan a la Dirección General de Educación Superior Universitaria e Intercultural, que considera el cumplimiento de metas, gasto corriente, costo de la plantilla, matrícula, entre otras.
Cabe destacar que las cuentas públicas de la institución han sido auditadas de manera recurrente por el órgano fiscalizador competente, la Auditoria Superior de la Federación.
Ejemplo de ello son las 33 auditorías practicadas a la Universidad en los últimos años a los recursos del Convenio de Apoyo Financiero, por entidades como la Auditoría Superior de la Federación y la Secretaría de la Función Pública. Además, se encuentra integrada la Contraloría Social Universitaria, la cual participa en la definición del despacho externo que audita los Estados Financieros de la Institución, presentando, a través de la Comisión de Hacienda y Glosa del Honorable Consejo Universitario, un Informe Trimestral al pleno.
El Modelo Educativo UAS 2022 está basado en el humanismo, en el valor de las personas, por lo que todos los integrantes de la comunidad rosalina: estudiantes, docentes, investigadores, trabajadores administrativos y de intendencia reciben un trato digno, en estricto apego a sus derechos como estudiantes o trabajadores, sin sancionar a nadie por diferir de la opinión de las autoridades.
Parte de ese humanismo se ve reflejado en diversos aspectos, como ser la primera institución del país que ha brindado cobertura universal a sus aspirantes de ingreso a los niveles medio superior y superior, dando cobertura total durante los dos últimos ciclos escolares, compromiso que se sostiene para el ciclo 2023-2024.
En beneficio de las y los trabajadores se implementó por primera vez un programa al estímulo a los trabajadores administrativos, se restableció el programa de estímulos al desempeño docente y de forma inédita se logró conseguir una significativa cantidad de plazas de Profesores de Tiempo Completo a través del Programa para el Desarrollo Profesional Docente (PRODEP), dependiente de la Dirección General de Educación Superior Universitaria e Intercultural (DGESUI) de la Secretaría de Educación Pública.
Por ser un derecho ganado a pulso, se ha brindado certeza laboral a mil 452 docentes de 32 Escuelas y Facultades, asignándose 34 mil 875 horas, proceso que habrá de continuar durante los próximos meses hasta cubrir todas las Unidades Académicas, en congruencia con el Nuevo Modelo Educativo.
La Universidad Autónoma de Sinaloa es una institución útil, entregada no solo a su trabajo académico sino también, y de forma destacada, al servicio de la gente, lo que ha quedado ampliamente demostrado a lo largo de toda la implementación de la Estrategia Nacional de Vacunación contra Covid-19, donde hemos puesto a disposición de las autoridades sanitarias numerosos espacios físicos, ambulancias, centro de resguardo de vacunas y más de 26 mil voluntarios, todo esto a lo largo de dos años, pues desde la primera vacuna que se aplicó a la población abierta, en febrero de 2021, ahí estuvo la UAS para apoyar al sistema de salud y a la población.
Asimismo, y con entera responsabilidad, fuimos la primera universidad pública del país en regresar a las clases presenciales, en octubre de 2021, lo que habla de la seriedad con que asumimos nuestro deber de educar y de cuidar a la juventud.
Esta es la Universidad Autónoma de Sinaloa: una institución útil, madura, seria; una casa de estudios estable, con visión de futuro, comprometida con su comunidad y con Sinaloa. Por ello, ante las diferentes iniciativas de reforma a la Ley Orgánica de la Universidad, se hace un llamado a las y los estudiantes, a los padres y madres de familia, a los empresarios, autoridades y organismos de la sociedad civil, a reflexionar sobre el tipo de Universidad que queremos, por lo que debemos preguntarnos: ¿Qué universidad quieres para tus hijos? ¿Una universidad anclada en los vicios del pasado, o una universidad estable que mira hacia el futuro?
El despegue académico que ha logrado la Universidad y la estabilidad que ha experimentado durante varios lustros, son producto de una Ley Orgánica que ha demostrado su vigencia y efectividad. A partir de ella se ha elevado la calidad académica, se han mejorado los procesos administrativos, se ha impulsado la investigación, la internacionalización, la movilidad estudiantil, la vinculación, la cultura y el deporte.
De regresar a prácticas del pasado, se estaría haciendo un enorme daño no solo a la Universidad, sino a todo el sistema educativo estatal, a los jóvenes y a sus familias, pues verían limitado su horizonte de formación académica y personal. Se estaría haciendo un enorme daño a las empresas y a los sectores productivos, pues se dejarían de aportar los profesionistas que la dinámica económica requiere ahora y en los años por venir.
En nuestro país existen diversas formas de nombrar autoridades universitarias: designación directa por el Presidente de la República o el Gobernador del Estado; mediante Juntas de Gobierno, integradas por no más de 15 personas o mediante el voto universal, lo que lleva a campañas y proselitismo que distraen el trabajo académico.
Al igual que en la mejores universidades del país, el modelo de elección de autoridades en la UAS es mediante el Honorable Consejo Universitario, en el cual están representadas todas y todos los estudiantes, los profesores, los cuerpos directivos, el sindicato, lo que constituye un mecanismo enteramente democrático, ordenado, transparente y garante de perfiles académicos y de gestión.
Por eso hago un llamado a toda comunidad universitaria, a los padres de familia y a los sectores productivos a cerrar filas en torno a la Universidad, pues somos una institución con pertinencia y sentido social, que le sirve a Sinaloa y le sirve a México.
Hago un llamado a defender a la Universidad Autónoma de Sinaloa y a defender su Autonomía.
Estamos celebrando 150 años de servicio a Sinaloa y a México.
Tenemos 150 años de historia, de lucha, de trabajo académico y de resultados, resultados que nos enorgullecen y nos hacen decir que ¡Viva la Universidad Autónoma de Sinaloa!
¡Somos grandes, somos UAS!
“Sursum Versus!
Culiacán, Sinaloa. 01 de marzo de 2023.