La interrupción en las cadenas de suministro, la escasez de semiconductores, así como un aumento en el precio del polietileno y del índice inflacionario, son los retos con los que cierra el año la industria juguetera nacional que, pese a ello, logrará alcanzar 95 por ciento de las ventas registradas en 2019 al finalizar este 2021.
En entrevista con La Razón el presidente de la Amiju, Miguel Ángel Martín, señaló que la “válvula de escape” para el sector ha sido en gran parte, el comercio electrónico, ya que con la pandemia las ventas de juguetes por este canal aumentaron de 6.0 por ciento a 18 por ciento.
Aseguró que luego de la caída de 15 por ciento en las ventas durante 2020, la industria se tuvo que reinventar.
Y en este proceso, los empresarios del sector instalados en México, ahora apuestan por ser líderes globales en la proveeduría para la fabricación de juguetes en Estados Unidos, así como de producto terminado.
Para ello, la Amiju, junto con la Secretaría de Economía (SE) y bajo los lineamientos del Tratado entre México, EU y Canadá (T-MEC), impulsa la creación de un clúster juguetero en el país.
La finalidad, sostuvo, es convertir a México en el principal proveedor de insumos de exportación para la fabricación de juguetes en el país vecino, cuyo mercado tiene un valor de 35 mil millones de dólares anuales.
De esos 35 mil mdd que consume el vecino país del norte, México sólo le vende mil 200 mdd anuales, tanto en manufactura como en juguete terminado. Por tanto, Estados Unidos y Canadá representan otra oportunidad de mercado para la industria juguetera mexicana y con ventajas comerciales otorgadas por el T-MEC.
Miguel Ángel Martín indicó que hay un interés muy importante de distribuidores y dueños de marcas en Estados Unidos que quieren sustituir, por producto mexicano, sus importaciones manufactureras procedentes de China.
“Hay marcas líderes en el mundo en la fabricación de juguetes que quieren traer sus líneas de producción a México, por lo que estamos a la espera de tener una buena noticia por parte de la Secretaría de Economía para que establezca las normas necesarias que nos permitan atraer esos mercados y ser competitivos frente a China”, explicó el presidente de la Amiju.
Asimismo, detalló que para el sector la crisis mundial sanitaria le favoreció con la apertura de nuevos canales de distribución, entre los que destaca el e-commerce.
Miguel Ángel Martín estimó que al terminar este 2021, el sector alcanzará ventas de entre 2 mil 400 y 2 mil 500 millones de dólares, lo que implica 300 millones de dólares menos que los 2 mil 700 millones de dólares que se vendieron durante el 2019; es decir, antes de la pandemia.
Incluso, de alcanzar los 2 mil 500 millones de dólares, aún se encontraría por debajo de los 2 mil 800 millones de dólares en ventas que la industria alcanzó en 2017 y que fue 6.0 por ciento más que lo registrado un año antes, de acuerdo con cifras reveladas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
PREVÉN AUMENTO EN LOS PRECIOS
El representante del sector juguetero en el país no descartó un aumento promedio de 10 por ciento en el precio de los juguetes para esta temporada navideña, toda vez que mientras en noviembre pasado la inflación del país se ubicó en un nivel de 7.37 por ciento; el precio de estos productos y de los juegos de mesa lo hicieron ligeramente por encima, en 7.34 por ciento.
Explicó que derivado de la crisis sanitaria de Covid-19 se produjo una escasez de diversos plásticos en todo el mundo, principalmente de polímeros, lo que provocó que su precio aumentara entre 2.40 y 2.50 dólares por kilogramo, contra 1.20 dólares que costaba en 2020.
Agregó que otra alza de materias primas que han tenido que enfrentar los empresarios del sector de México y el mundo es el aumento en el costo del acero y la escasez de chips y microcomponentes para los juguetes electrónicos.
A principios de noviembre pasado, la empresa Nintendo Switch anunció que reduciría su producción de consolas de videojuegos en 20 por ciento hasta el 31 de marzo, debido a la escasez de semiconductores y otros componentes, con lo que su producción disminuyó de 30 a 24 millones de unidades.
Actualmente la industria del juguete en México representa mil 900 millones de pesos anuales, de los cuales 70 por ciento son importaciones; en tanto, el consumo por habitante de estos productos es de 300 pesos anuales, mientras que el país es el cuarto productor a nivel mundial.
En su estudio “Conociendo la industria del juguete” el Inegi reportó que las familias de México gastan anualmente un aproximado de 79 millones de pesos en artículos educativos y de recreación o esparcimiento.
Eso representa que el ciudadano mexicano destina el 13.5 por ciento de sus ingresos a la compra de este tipo de artículos. Las industrias jugueteras mexicanas tienen concentrado sólo un 35 por ciento del mercado nacional, el cual representa en dinero 2 millones de dólares anuales.
De igual forma, el sector nacional se divide en dos: el tradicional que son los pequeños empresarios y artesanos que implican alrededor de 200 talleres distribuidos en todo el país.
Mientras que la otra parte está representada por aproximadamente 70 medianas y grandes empresas como es el caso de Mi Alegría, Apache, Princel y Montecarlo que son nacionales, además de las trasnacionales como Mattel, Lego, Hasbro y Famosa.
Además, la importancia de la industria también se explica por los puestos de empleo que genera en la temporada decembrina, con hasta 22 mil empleos directos, mientras que en el resto del año alcanza las 10 mil fuentes de trabajo formales.