Los cigarrillos electrónicos, conocidos como “vapeadores”, están prohibidos en México y existen estudios que demuestran que su uso causa daño pulmonar grave y otros riesgos para la salud, mencionó el comisionado Jorge Alan Urbina Vidales
Culiacán, Sinaloa a 26 de septiembre del 2019.- La Secretaría de Salud, través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRISS), alerta a la población sobre los riesgos a la salud, destacando el daño pulmonar grave, por inhalar los cigarrillos electrónicos conocidos como “vapeadores” y que son ilegales en México.
El comisionado Jorge Alan Urbina Vidales informó que la Secretaría de Salud, a través del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias “Ismael Cosío Villegas”, informó que diversos estudios demuestran que el uso de “vapeadores” representa un serio riesgo para la salud de sus consumidores.
Este Instituto informó sobre los resultados de los estudios realizados en 200 casos documentados por las autoridades sanitarias en Estados Unidos donde adolescentes y adultos jóvenes padecían lesión pulmonar grave asociada al uso de cigarro electrónico o “vapeador”.
“Alertamos a la población a no usar los cigarrillos electrónicos por el peligro potencial de los dispositivos electrónicos de generar daño pulmonar grave a corto plazo”, advirtió.
Sostuvo que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) no autoriza la importación, distribución, comercialización y venta del denominado cigarrillo electrónico, mismo que está prohibido por el artículo 16 fracción VI de la Ley General para el Control del Tabaco.
Un estudio divulgado recientemente precisa que los cigarros electrónicos generan un aerosol a través del calentamiento de un líquido que contiene nicotina, glicerina y saborizantes y que alcanza ampliamente al sistema respiratorio, tanto en vías aéreas de conducción como en zonas alveolares, debido al pequeño tamaño de las partículas generadas (100-160 nm).
Urbina Vidales expuso que, según el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias “Ismael Cosío Villegas”, en el aerosol inhalado se han encontrado, en general en cantidades mucho menores que en el humo del cigarro, muchos compuestos tóxicos, entre ellos formaldehido, compuestos orgánicos volátiles, hidrocarburos policíclicos, nitrosaminas y metales (cromo, cadmio, zinc, niquel), provenientes del calentamiento del líquido, del dispositivo o procedentes de la batería, varios de ellos conocidos carcinógenos o irritantes.
El mismo Instituto señala que la irritación es capaz de generar inflamación en las vías respiratorias, síntomas respiratorios en personas previamente sanas, o un empeoramiento de síntomas respiratorios en pacientes con asma, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) o fibrosis quística.
“La información sobre los casos descritos son más graves ya que con la falta de aire se pueden desarrollar de días a semanas, tos seca, dolor en el tórax, fatiga, o fiebre”, comentó.
El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias “Ismael Cosío Villegas” ha documentado la presencia de incremento en glóbulos blancos en la sangre, así como opacidades bilaterales pulmonares (manchas en el pulmón), baja oxigenación en la sangre o inclusive falla respiratoria, llegando a requerir estancias en terapia intensiva y ventilación mecánica. En el líquido obtenido por broncoscopía, se ha identificado la presencia de células de defensa (macrófagos alveolares) llenos de lípidos como los que se describen en la neumonía lipoidea.
Urbina Vidales aseveró que según las investigaciones realizadas en el ámbito federal la exposición de los adolescentes a la nicotina puede traer repercusiones a largo plazo para el desarrollo cerebral y causar ansiedad y trastornos del aprendizaje; y el uso de “vapeadores” entre menores que nunca han fumado duplica la probabilidad de que empiecen a fumar cigarros tradicionales.
Subrayó que los riesgos a la salud pública emanan primordialmente del esperado incremento en adictos a la nicotina, que pueden pasar a fumar cigarrillos normales en forma única o combinada; sin embargo también están aquellos generados por los efectos irritantes en el pulmón, aunados a los debidos al mal funcionamiento de las baterías y al calentamiento del dispositivo.
Puntualizó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que los “vapeadores” con nicotina generan un aerosol que, además de nicotina, suele contener elementos dañinos para el corazón y para los pulmones. “De acuerdo a la OMS existen cerca de 8,000 aromas en soluciones liquidas para los ‘vapeadores’ y sistemas electrónicos en todo el mundo; muchas de estas sustancias causan sensibilidad, irritación e inflamación en las vías respiratorias e incluso infecciones virales”, comentó.
Finalmente, expresó que la OMS ha establecido que el aerosol de los “vapeadores” no es simplemente “vapor de agua” como se suele afirmar en la mercadotecnia de estos productos, y por lo tanto, conllevan riesgos sanitarios.