El secretario de Administración y Finanzas, Carlos Ortega Carricarte, dijo que Sinaloa cuenta con las tasas de interés más competitivas y una calificación crediticia estable, lo que refleja un bajo riesgo crediticio

 

Culiacán, Sinaloa; julio de 2019.- Sinaloa se ha posicionado en el mejor lugar, junto la Ciudad de México, en la tasa de interés sobre créditos de corto plazo, con base en cifras reportadas a la SHCP, y la segunda mejor tasa de largo plazo. Asimismo, las firmas internacionales Fitch, Moody’s, y Standard and Poor’s califican a Sinaloa con alta calidad crediticia, mejorado su perspectiva durante 2017 y 2018. En 2019 Moody’s la ha mantenido, contrario a lo que ocurre con la perspectiva del Gobierno Federal y de Pemex.

 

Esto lo dio a conocer el secretario de Administración y Finanzas, Carlos Ortega Carricarte, quien profundizó y habló sobre las perspectivas financieras para este año, particularmente a lo referente a la inversión pública proveniente del Gobierno de la República, la cual se desplomó.

 

Se refirió a la cancelación del Ramo 23, mediante el cual el estado recibía recursos adicionales a lo largo del año, y citó que en el 2018 Sinaloa obtuvo por éste y otros conceptos como ingresos propios, la cantidad de 8 mil millones de pesos adicionales a lo presupuestado, pero en lo que va de enero a junio de este año por parte del gobierno federal sólo se han recibido 287 millones de pesos adicionales.

 

Ortega Carricarte mencionó que también el año pasado se registraron y aprobaron en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público múltiples proyectos de inversión con los recursos adicionales, y a la fecha solamente se han autorizado tres, que son las obras de infraestructura hidráulica del dren Urías en Mazatlán, y los drenes Bacurimí y Adolfo López Mateos, ambos en Culiacán, que totalizan 289 millones de pesos provenientes del Fondo Metropolitano.

 

Para hacer frente a esta situación, el secretario de Administración informó que en lo que va de este año, se han incrementado los ingresos propios 4.5 por ciento, lo que contrasta con la caída en el Fondo Federal de Participaciones, así como una mayor fiscalización a las empresas y personas físicas, en coordinación con el Sistema de Administración Tributaria, lo cual ha permitido que desde el 2017, el estado de Sinaloa ha sido la entidad número uno a nivel nacional en obtener mayor recaudación de esta fuente de recursos, lo que ha representado alrededor de tres mil millones de pesos adicionales para hacer frente a las necesidades financieras del estado.

 

“Esta situación ha permitido que pese al entorno nacional los mercados financieros y las empresas calificadoras de crédito vean al estado favorablemente. Y aquí quisiera destacar que la semana pasada se adjudicó mediante un proceso competitivo un crédito de corto plazo por 500 millones de pesos”, añadió.

 

Explicó que acudieron seis bancos nacionales y los ganadores fueron Scotiabank con 400 millones de pesos, y Banamex con los restantes 100 millones de pesos, ambos con una tasa de TIIIE + 0.29 puntos, que es la más baja de créditos de corto plazo otorgada a los estados, la misma que obtuvo la Ciudad de México.

 

Ortega Carricarte mencionó que la sobre tasa obtenida representa una disminución del 87 por ciento con respecto a la tasa que se aplicó para la administración estatal anterior en 2016, para los créditos a corto plazo, mientras que en reestructuración de la deuda de largo plazo, el año pasado obtuvieron una tasa promedio ponderada de los diversos bancos de TIIE + 0.33, equivale una disminución del 57 por ciento.

 

Al respecto, refirió que Moody’s bajó la calificación del Gobierno de la República de “Estable” a “Negativa” y a PEMEX bajo la calificación, mientras que en el caso de Sinaloa la mantuvo en este 2019 como “Estable”, calificación que se mejoró en el gobierno de Quirino Ordaz Coppel, que pasó de “Negativa” a “Estable” en 2018.

 

“Entre los factores que destacan las calificadoras para otorgar su calificación destacan el crecimiento de los ingresos propios, la disciplina financiera, el bajo nivel de endeudamiento y una sólida inversión pública”, concluyó.