* Jorge Alan Urbina Vidales precisó que se impulsan acciones preventivas y de coordinación para la recolección y manejo seguro de envases de plaguicidas para la protección contra riesgos sanitarios, cuidar el medio ambiente y el bienestar de la población
Culiacán, Sinaloa a 6 de junio de 2019.- Amocali Campo Limpio, asociación civil que representa más de 250 empresas de agroquímicos y afines, reconoce el potencial agrícola de Sinaloa y su liderazgo nacional en la recolección de envases de plaguicidas para conservar el campo limpio pero advierte la necesidad de fortalecer las acciones para evitar la piratería, falsificación y comercio ilegal de recipientes contaminados que pueden afectar al sector y ponen en riesgo la salud y el medio ambiente.
Por tal motivo, COEPRISS realizó reunión del Comité Estatal de Seguridad para el Manejo, Uso y Control de Plaguicidas, Fertilizantes y Sustancias Tóxicas (COESPLAFEST) en CAADES con el propósito de generar conciencia y reducir el riesgo de contaminación por manejo de residuos peligrosos, problemas de intoxicación y afectación a la salud de trabajadores agrícolas, así como el fortalecimiento de los mecanismos para el manejo, recolección y destino final de envases vacíos.
En la sala de juntas “Lauro Díaz Castro” del edificio de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa (CAADES), Abraham Salas Chávez, coordinador regional de Amocali Campo Limpio, realizó una exposición en la que precisó que según datos de CropLife Latin America, organización gremial internacional que representa a la Industria de la Ciencia de los Cultivos, México se sitúa como tercer país con mejores tasas de recuperación de envases vacíos, solo detrás de Brasil y Argentina, que son potencias agroalimentarias. “Sinaloa forma parte de ese esfuerzo que nos convierte en líderes en América Latina”, sostuvo.
Sin embargo, Jorge Alan Urbina Vidales, Comisionado Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Sinaloa (COEPRISS) y Gustavo Rojo Plascencia, presidente de la CAADES, expresaron su preocupación por fortalecer la coordinación de estrategias para un manejo integral de los envases vacíos de productos para la protección de cultivos con el propósito de prevenir los riesgos a la salud y favorecer la sustentabilidad del medio ambiente. “Se requieren fortalecer las acciones para proteger al medio ambiente y a las personas”, coincidieron.
El titular de COEPRISS, Urbina Vidales, señaló que los efectos a la población expuesta indirectamente y los daños al medio ambiente, hacen necesario impulsar y reformular programas y medidas preventivas que garanticen el manejo seguro de estos envases.
La Asociación Mexicana de la Industria Fitosanitaria, A.C. (AMIFAC) creó en 1996 el programa voluntario Conservemos un Campo Limpio, dando inicio a la operación del Plan de Manejo de Envases Vacíos de Agroquímicos y Afines. El programa Campo Limpio en Sinaloa, comprende un conjunto de acciones que se desarrollan de manera coordinada entre la CAADES, las Asociaciones de Agricultores, las Empresas Comercializadoras y Distribuidoras de Agroinsumos, las Juntas Locales de Sanidad Vegetal, el Comité Estatal de Sanidad Vegetal y la Dirección de Sanidad Vegetal de la Delegación SAGARPA.
Amocali, asociación fundada en 2010, se convirtió en el eje de los esfuerzos de Campo Limpio, programa que nació en México para solucionar el problema del incorrecto e histórico manejo y disposición de envases vacíos de agroquímicos que lamentablemente, en ocasiones, son tirados de forma irresponsable en los canales de riego, ríos, arroyos, zanjas, brechas, barrancas, campo abierto y en otros casos quemados o enterrados, generando focos de contaminación del medio ambiente, representando un peligro para la salud de las personas y de los animales.
Abraham Salas lamentó que en México se recolecta alrededor del 40 por ciento de los contenedores que se usan en los cultivos mientras que en Brasil, líder en América Latina, se recolectan el 94 por ciento de los envases plásticos. Hay que destacar que Brasil y Argentina cuentan con avances normativos en la materia. “La Campaña LAPE: Lava, Ahorra, Perfora y Entrega, es fundamental”, subrayó.
En su exposición, Salas Chávez explicó el sistema para clasificar, lavar y mandar a su destino final los envases vacíos según su grado de toxicidad, donde algunos se incineran, otros se usan en cementeras como combustible y otros se reciclan para utilizarse como material, cuidando que el ser humano y los animales no tengan contacto con el producto.
Todos los envases destinados a su eliminación, puntualizó, necesitan ser limpiados previamente a través de una práctica de campo denominada triple lavado, que consiste en agregar agua limpia al envase vacío en tres ocasiones y agitar 30 segundos cada vez, perforar o aplastar el envase, llevarlo a los centros de acopio y finalmente, establecer su destino final. “La recepción de envases es resultado de la colaboración de todos los actores que colaboran en el programa Campo Limpio”, comentó.
El evento contó con la participación de representantes del Comité Estatal de Sanidad Vegetal del Estado de Sinaloa, Servicio de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), Protección Civil, PROFEPA, Comisión de Ecología del Parlamento Ciudadano, SEMARNAT, SAGARPA, Secretaría de salud, Secretaría de Desarrollo Social y Humano (SEDESHU), SENASICA, Vialidad y Transporte, Liga de Comunidades Agrarias, IMSS y Dirección del Trabajo, entre otras instituciones.