Ernesto Zedillo Ponce de León fungió como Presidente de México del año 1994 al 2000.
Desde el inicio del nuevo milenio, el ex mandatario nacional se encontraba en una especie de auto exilio social y político…El silencio lo envolvía.
Solo la elite política, académica, intelectual y económica de nuestro país sabía de sus pasos por el mundo, gracias a sus conferencias y cátedras en Universidades y foros del mundo.
El resto de la población mexicana lo miraban como la caca de esa ave silvestre de nuestros montes, al que algunos campiranos conocimos como “Queleli”, que ni huele ni apesta.
Sin embargo, hace apenas unos días, Ernesto Zedillo de manera repentina resucitó de la cloaca del olvido, y recobro vida en su viejo medio ambiente, es decir, en el espectro político.
Y lo interesante es que el ex Presidente, volvió a la vida púbica nacional, despojado de la sátira referencial del “Queleli” ya que en su regreso vino provisto de un rejuvenecedor aroma.
Si, Zedillo volvió a los escenarios políticos despidiendo por toda la nación un intenso olor a confrontación, a debate, a polémica, a careo.
Zedillo volvió impregnado de un olor a guerrero Azteca, con lanza, arco y flechas en sus manos, y listo para combatir al enemigo ya definido.
Curiosamente, su objetivo de ataque, sería la misma persona que en base a su alta investidura Institucional, lo saco del inactivismo y olvido político y social.
Me refiero por supuesto a la Presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo, quien a través de su fama pública, y quizá sin pensarlo, lo regresó al pelotón de utilería política de sus adversarios.
Era entonces de esperarse, que EZPL, habría de regresar cargando en sus alforjas, no solo el aroma que había perdido, o nunca tuvo, sino también las luces necesarias para volver a brillar en el marco nacional que la propia Claudia Sheinbaum le puso en charola de plata.
Por esa razón, Zedillo ya huele y brilla en ese escenario que, quiérase o no, circunstancialmente le otorgo la Presidenta.
¿Pero, por que decir que Claudia Sheinbaum, le concedió esa gracia a Ernesto Zedillo?;
Es la pregunta que algunos se estarían planteando, y que, desde mi óptica muy particular, me permito ofrecer.
Mi conjetura refiere, que la jefa del ejecutivo nacional, pudo haber caído en una astuta trampa fraguada y tendida desde los fríos sótanos en que ocultos se parapetan los más hábiles y astutos miembros de la oposición.
La idea de esa especie de mafia política, pudo haber sido, la de elegir una voz, con peso un político importante, tanto dentro como fuera del País, para golpear la espina dorsal del gobierno de la Cuarta Transformación.
La escuálida oposición necesitaba una voz política calificada, de primer nivel, mesurada, seria, sensata, pero sobre todo, con debilidades si, pero capaces de resistir la calculada y consabida replica que sin duda se dejaría sentir desde los espacios de Morena.
Es evidente, desde mi óptica juiciosa, que para la citada tarea de golpear al proyecto político de la 4T, se debió pensar en los ex Presidentes que aún viven, como son Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón, y Enrique Peña Nieto.
Creo tener razones suficientes para pensar en que el ideal resultaría ser Ernesto Zedillo, por ser quizá, el menos salpicado por actos de corrupción, mal gobierno y descredito social de los cinco ex Presidentes.
Dando por hecho ese razonamiento, una vez elegido EZPL como el personaje central de la operación anti Morena, solo restaría lanzar el anzuelo en busca del pez gordo que devoraría su carnada.
Y fue así, según mi hipótesis, como el citado ex mandatario escribió en la Revista “LETRAS LIBRES”, un Artículo titulado “MEXICO, DE LA DEMOCRACIA A LA DICTADURA”.
En el contexto, Zedillo critica de manera severa las Reformas tanto al Poder Electoral, como al Judicial, aprobadas por los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum.
De todos es ya conocido, que al ser publicado en “LETRAS LIBRES” el impacto mediático del artículo editorial fue tal, que la respuesta surgió inmediata desde Palacio Nacional y de boca misma de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y aun más, a través de la conferencia la mañanera del Pueblo, con cobertura nacional e internacional.
En pocas palabras, La Presidenta había caído en la trampa tendida por la poderosa red opositora que opera desde trincheras ocultas de la nación.
Un debate público con la Presidenta de México, era el suculento platillo que la mermada oposición mexicana requería para recobrar fuerza, energía y presencia política entre el pueblo de México.
Y ahí estaban ya todos los medios nacionales replicando la respuesta de CLAUDIA SHEINBAUM al escrito de Ernesto Zedillo.
Una respuesta que sin duda el ex Presidente y asociados habían pensado ocurriría, y habían pensado bien.
Y, en efecto, para su contra ataque, la Presidenta habría utilizado como su gran herramienta política, para golpear la honestidad, ética y la moral de Ernesto Zedillo.
En efecto, me refiero al trillado, pero aún vigente tema del FOBAPROA, y en menor termino la pensión vitalicia por 143 Mil Pesos mensuales que le otorga el Banco de México, y que Claudia, aseguró pedirá investigar en aras quizá de encontrar elementos legales para suspendérsela
Por cierto, EZPL acepta que en efecto recibe la pensión de BANXICO, pero aclaró que se trata de un derecho laboral obtenido tras haber trabajado para esa Institución desde el año 1978 al 1987 como analista y sub Gerente de investigación económica, con lo cual, dice, logró su jubilación basada en el régimen anterior al actual.
Pero más allá del intercambio de acusaciones entre la Presidenta y el Ex –Presidente, lo cierto es que dicha confrontación solo ha generado una polémica estéril, inútil y dañina para la necesaria y urgente unidad nacional en torno a nuestro País.
El pleito Sheinbaum-Zedillo solo está sirviendo de alimento para las notas, artículos, editoriales, y columnas de los distintos medios de comunicación, generando en muchos ciudadanos el morbo, coraje, desidia, y sobre todo la indignación hacia uno y otra participante.
Finalmente, frente a tal panorama político, la última pregunta, respecto al debate CSP-EZPL se hace necesaria e indispensable…
¿ Quién gana y quien pierde en este encontronazo de trenes políticos?.
Mi respuesta es que gana Ernesto Zedillo, y no porque sea suya la razón, sino porque el ex Presidente emergió desde una especie de anonimato y olvido, y tras el acre debate con la Presidenta, su nombre, su figura, y su trayectoria política, social y académica han cobrado importante relevancia.
Y es que Zedillo, ya ha sido juzgado por la historia, por lo que a estas alturas de la vida nada tiene que perder, pero si mucho que ganar, sobre todo la oposición a la que regreso para servir.
Es posible pensar que EZPL habrá de seguir en el debate con la Presidenta, aunque claro, si antes ella no decida ignorarlo y dejar de atender sus rechiflas, para de esa manera regresarlo al olvido político en que había permanecido silencioso los últimos 25 años de su vida…
Así están las cosas en este inquietante y muy intenso mundo de la política a la mexicana… Nos veremos enseguidita.