La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha dejado claro que no hay intención de reanudar las relaciones diplomáticas con Ecuador mientras Daniel Noboa permanezca en la presidencia. En una conferencia de prensa este martes, Sheinbaum cuestionó la legitimidad del triunfo de Noboa, señalando que organizaciones internacionales, incluida la Organización de los Estados Americanos (OEA), han expresado dudas sobre la equidad de las elecciones.
“Nosotros, para empezar, no tenemos relaciones con Ecuador, ni vamos a seguir teniendo relaciones con Ecuador mientras Noboa ejerza el cargo de presidente, porque él fue el responsable de la invasión a la embajada de México, a nuestra soberanía”, declaró Sheinbaum, refiriéndose al asalto a la sede diplomática que resultó en la detención del exvicepresidente correista Jorge Glas.
Glas, quien se encontraba bajo asilo político en la embajada mexicana, fue arrestado el 5 de abril de 2024. Desde entonces, ha sido trasladado a la cárcel de máxima seguridad La Roca en Guayaquil, donde su salud se reporta como “crítica”. Este incidente ha desencadenado un litigio entre México y Ecuador en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, con ambas naciones acusándose mutuamente de violar convenios internacionales.
Sheinbaum también hizo eco de las preocupaciones planteadas por la OEA, que había exhortado a Noboa a solicitar una licencia de la presidencia antes de las elecciones, advirtiendo que su falta de acción afectó la equidad del proceso electoral y debilitó la institucionalidad del Estado ecuatoriano. Además, mencionó las alegaciones de fraude formuladas por Luisa González, correista y rival político de Noboa.
La postura de Sheinbaum resalta la complejidad de las relaciones bilaterales en un momento en que la política ecuatoriana está en un estado de agitación. La negativa de México a restablecer la comunicación diplomática refleja no solo un desacuerdo político, sino también la defensa de la soberanía ante lo que consideran un ataque a su representación en el exterior.
A medida que la situación evoluciona, será fundamental observar cómo estas tensiones afectan las relaciones entre ambos países y qué implicaciones tiene para las políticas regionales en un contexto donde la estabilidad política es cada vez más frágil.
Con Información de Latinus.