¿Estamos en riesgo de ser reemplazados por la inteligencia artificial? Este es el panorama que se presenta según estudios de la UNAM sobre los trabajos que se verán afectados por los avances tecnológicos.
La llegada de la inteligencia artificial (IA) ha generado un cambio significativo en el ámbito laboral, suscitando preocupaciones sobre un posible aumento del desempleo y un incremento en la ansiedad y depresión entre los trabajadores.
De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), entre el 45% y el 47% de los empleos en el mundo están en peligro debido a los avances tecnológicos. Ante esta situación, la UNAM ha emitido una advertencia sobre los trabajos que corren riesgo por la IA.
¿Cuáles son los empleos en peligro por la IA?
En una entrevista con Gaceta UNAM, David Cuenca Orozco, profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, explicó que la automatización es un fenómeno creciente que se aceleró con la Cuarta Revolución Industrial. Señaló que la diferencia entre quienes pueden adaptarse a esta nueva realidad y aquellos que no tienen los recursos para hacerlo seguirá aumentando. Por lo tanto, es vital implementar programas de alfabetización digital y capacitación para que los trabajadores no queden atrás.
Cuenca destacó que los empleos más vulnerables son aquellos que involucran tareas repetitivas y que no requieren de un análisis crítico o intelectual. Entre ellos se encuentran sectores como:
– La industria de la maquila
– La manufactura
– Las tecnologías de la información y la comunicación
Asimismo, mencionó que sectores como la automotriz, confección y audiovisual están adoptando la IA, lo que hace que ciertas tareas se automaticen y dejen de depender del trabajo humano.
Por otro lado, la IA generativa ha comenzado a influir en industrias creativas al permitir la creación de textos, imágenes, música y videos a partir de datos de entrenamiento. Sin embargo, en algunos casos, aún se requiere supervisión humana para la operación y mantenimiento de estos sistemas.
A pesar de estas tendencias, David Cuenca enfatizó que “no todos los empleos desaparecerán o serán reemplazados por máquinas”, ya que todavía existen instrucciones y parámetros definidos por humanos que, hasta el momento, continúan dependiendo de su intervención.
Adaptación a las nuevas tecnologías es esencial
Para enfrentar estos desafíos, muchas empresas han comenzado a implementar programas de alfabetización digital y actualización de habilidades. Cuenca advirtió que aquellas organizaciones que no se adapten a la era de la automatización podrían enfrentar serios problemas en el futuro.
“No se trata solo de introducir tecnología en las empresas y esperar que, como por arte de magia, transforme el entorno laboral”, explicó.
“La IA tiene el potencial de hacer que los procesos productivos sean más eficientes, organizando, administrando y ejecutando múltiples tareas de manera más rápida y digitalizada”.
Cuenca subrayó la importancia de encontrar un equilibrio entre la tecnología y el trabajo humano. “No es saludable ser tecnofóbicos, pero tampoco es recomendable ser tecnofílicos y depender completamente de la IA y la automatización, ya que si llegamos a ese punto, la naturaleza humana podría verse comprometida”, concluyó.
Con información de Tech Bit.
