El Grupo Parlamentario del Partido Sinaloense, conformado por la diputada MC. Angélica Díaz Quiñónez y el diputado Víctor Antonio Corrales Burgueño, se pronunciaron en tribuna porque el fomento a la lectura sea un tema prioritario en la agenda estatal y nacional pues en México, de acuerdo a la Prueba PISA 2022 de la OCDE, solo el 1% de los estudiantes mexicanos alcanzó los niveles más altos en lectura, mientras que el 55% se ubicó en niveles moderados-bajos.
El coordinador de la bancada PASista reconoció que, aunque se han logrado avances significativos en materia de alfabetización, la comprensión lectora sigue siendo un desafío preocupante.
“El problema no radica sólo en la alfabetización de la población, sino en el deficiente nivel de comprensión, análisis y aplicación de lo leído. La falta de comprensión lectora afecta el desempeño académico, limita las oportunidades laborales y reduce la capacidad de las personas para participar activamente en la vida democrática. Es decir, la lectura no solo es una habilidad individual, sino una herramienta indispensable para el desarrollo colectivo de cualquier nación”, así lo dijo el Dip. Corrales Burgueño.
Añadió que según el Módulo sobre Lectura (MOLEC) 2024 del INEGI, los mexicanos leyeron en promedio 3.2 libros al año, una cifra que ha disminuido en comparación con los 3.9 libros reportados en 2022. Es importante destacar que, aunque los libros siguen siendo el material de lectura más consultado, con un 41.8% de preferencia, otros formatos como páginas de Internet, foros o blogs han ganado terreno, alcanzando un 39.4% de lectores. Esta diversificación en los hábitos de lectura podría estar influyendo en la disminución del promedio de libros leídos por año.
Corrales Burgueño señaló que México cuenta con 15 mil 189 bibliotecas, distribuidas en los siguientes espacios: 7 mil 413 pertenecen a la Red Nacional de Bibliotecas Públicas, 5 mil 904 están ubicadas en escuelas de educación básica y media superior, y mil 857 se encuentran en universidades. Sin embargo, dijo, muchas de estas bibliotecas enfrentan importantes retos en su operación: La falta de modernización tecnológica, la ausencia de materiales actualizados y la carencia de estrategias innovadoras son algunos obstáculos para atraer a las nuevas generaciones y limitan su alcance e impacto.
“Para fomentar la lectura y revertir esta tendencia, de manera propositiva, creemos esencial implementar políticas públicas que promuevan el acceso a libros y la creación de espacios que incentiven este hábito desde edades tempranas. Además, la colaboración entre instituciones educativas, culturales y gubernamentales puede desempeñar un papel crucial en la promoción de la lectura en la sociedad mexicana. Estas acciones deben incluir la actualización tecnológica de las bibliotecas, el fortalecimiento de su presupuesto y la promoción de actividades que acerquen a los jóvenes al hábito lector”.
Sinaloa es un ejemplo de compromiso cultural con la promoción de la lectura a través de eventos destacados. La edición número 23 de la Feria del Libro del municipio de Ahome, celebrada del 17 al 24 de noviembre en la ciudad de Los Mochis, representa un espacio clave para acercar los libros y la cultura a la comunidad. Por su parte, la reciente Feria Internacional del Libro organizada por el Ayuntamiento de Culiacán ha reforzado el papel de la capital como un centro de intercambio cultural y literario. Asimismo, la Universidad Autónoma de Sinaloa se ha consolidado como un referente académico con su feria anual, que fomenta el hábito lector entre estudiantes y público en general.