En un movimiento drástico que ha sacudido el aparato político de Sinaloa, la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ) de Morena ha decidido expulsar a tres personajes del partido: la diputada local María Victoria Sánchez Peña, el ex alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres, y el regidor Roberto Rodríguez Lizárraga. Esta decisión se basa en múltiples infracciones a los principios y documentos básicos del partido, en un contexto donde la cohesión y la lealtad son esenciales para su imagen y funcionamiento.
La resolución contra María Victoria Sánchez se centra en su postulación a la Presidencia Municipal de Culiacán por el Partido del Trabajo (PT) durante las elecciones 2023-2024, a pesar de no existir un convenio de coalición entre ambos partidos. La CNHJ argumentó que su decisión de aceptar esta candidatura constituye una violación directa a las normativas internas de Morena, lo que llevó a su expulsión y a la cancelación de su registro en el Padrón de Protagonistas del Cambio Verdadero, inhabilitándola para futuras postulaciones bajo el partido.
Luis Guillermo Benítez, quien fue alcalde de Mazatlán en dos ocasiones (2018 y 2021), también ha sido objeto de la misma medida. Enfrentando un proceso penal por presuntos actos de corrupción, la CNHJ determinó su expulsión debido a que se postuló como candidato del PT sin tener una coalición local con Morena durante las recientes elecciones. Benítez no logró obtener una diputación local en el distrito 22 y, a raíz de su expulsión, se le han cerrado las puertas para futuras candidaturas en el partido.
Por su parte, Roberto Rodríguez Lizárraga fue sancionado por promover a un candidato externo durante la campaña municipal, apoyando a Guillermo Romero Rodríguez, quien representaba a la coalición “Fuerza y Corazón por Sinaloa” (conformada por PRI, PAN, PRD y PAS), en lugar de respaldar a la candidata de Morena, Estrella Palacios. Su actuación fue considerada como una falta grave a los principios de la organización, lo que también resultó en su eliminación del Padrón de Protagonistas del Cambio Verdadero.
La expulsión de estos tres miembros de Morena no solo resalta la importancia de la disciplina interna, sino que también plantea preguntas sobre la dirección futura del partido en Sinaloa. En un entorno donde la lealtad y el cumplimiento de los principios son fundamentales para la cohesión, estas decisiones reflejan un esfuerzo por parte de Morena para mantener su integridad y credibilidad ante la ciudadanía.
La CNHJ, al tomar estas decisiones, busca enviar un mensaje claro sobre las expectativas que tiene de sus miembros. La expulsión de personajes como María Victoria Sánchez, Luis Guillermo Benítez y Roberto Rodríguez Lizárraga marca un hito en el manejo interno del partido y podría influir en la percepción pública sobre la seriedad con la que Morena aborda las violaciones a sus principios.
Este episodio también tiene implicaciones familiares, especialmente en el caso de María Victoria Sánchez, quien es madre de Merary Villegas Sánchez, actual diputada federal y dirigente con licencia de Morena en Sinaloa. La expulsión de Sánchez Peña podría tener repercusiones en la dinámica política familiar y en la imagen del partido en la región.
A medida que se desenvuelven las repercusiones de estas expulsiones, la atención se centrará en cómo Morena reconfigurará su estrategia política y cómo estas decisiones afectarán su rendimiento electoral en el futuro. La política en Sinaloa sigue siendo un campo en constante cambio, y la capacidad del partido para adaptarse y mantener la cohesión interna será crucial en los próximos meses.
