En la vida todos queremos volar y llegar a las alturas, pero el temor a caer desde lo alto al temible vacío nos detiene.

En el ámbito del gobierno y la administración pública existe un cargo que sin duda emociona y engrandece, aunque al mismo tiempo atemoriza.

El encargo de titular de la Fiscalía General de Justicia de Sinaloa, ofrece en la apariencia un panorama de poder y bonanza económica.
El salario no es malo, y tampoco los privilegios que la posición ofrece.

En nuestro Estado de Sinaloa convertirse en Fiscal General de Justicia, puede ser navaja de dos filos, con la que el tenedor puede cortar, pero también cortarse.

Sin embargo, frente a las convocatorias para la elección de ese espacio de gobierno, no faltan las y los valientes que aceptan el reto.

El espejismo del poder avasalla y conquista a los valientes y exitosos juristas, llevándolos hacia esa especie de aventura impredecible en que se ha convertido la impartición implacable e impecable de la justicia.

Buscan hombres y mujeres el cargo de Fiscal, sabedores de que más allá de su preparación, honestidad y voluntad, muchas veces los hechos y circunstancias imprevisibles mueven drásticamente la balanza de la justicia, arrebatando a los responsables de su impartición, su deseo de llevar las cosas por el camino correcto, y estrictamente apegado a la legalidad.

Lo malo y dramático para los Fiscales, es que en Sinaloa los hechos y circunstancias impredecibles, ocurren con singular regularidad.

La Fiscal Sara Bruna Quiñonez Estrada había llegado a la titularidad de la dependencia con una importante y destacada carta de presentación… “La Jueza de hierro” le llemaban.

Sin embargo, hechos y circunstancias inesperados irrumpieron en el ámbito de sus facultades oficiales, derribando su estigma de mujer justiciera, para convertirla, casi en una perseguida judicial.

Sara Bruna paso de ser juzgadora, a ser juzgada por una sociedad que ya nada quiere perdonar y juzga y sentencia con índice de fuego a quien considera un mal funcionario.

La hoy ex Fiscal de Sinaloa, cometió errores voluntarios o involuntarios en una serie de eventos delictivos que la envolvieron y la tienen sentada en el terrible banquillo de los acusados por la implacable opinión pública.

El ensueño del vuelo que la había colocado en las alturas, se convirtió en un impredecible torbellino que la envolvió y la arrastro hasta golpearla en el duro suelo de la realidad.

Es ese el juego en el que tendrán que participar los, y las valientes que buscan tomar la estafeta de mando de la Fiscalía de Justicia de Sinaloa, que hoy ha dejado acéfala la Abogada Sara Bruna Quiñonez Estrada.

    LA RUTA DE SARA BRUNA Y RIOS ESTAVILLO.

A partir de año 2017, durante el gobierno de Quirino Ordaz Coppel, la Fiscalía General de Justicia de Sinaloa gracias a una Reforma constitucional logra su autonomía del poder ejecutivo del Estado.

Antes el órgano de gobierno se conocía como Procuraduría y su titular era electo para un periodo de 6 años.

Era el gobernador en turno, quien designaba al entonces Procurador de Justicia de Sinaloa, como parte de su gabinete de gobierno.

Tras la Reforma aprobada por el Congreso, el ente de gobierno pasa a constituirse en la independiente Fiscalía General de Justicia a cuyo titular se elige por un periodo de 7 años.

Es decir, que la, o el Fiscal en funciones no podría ser removido por indicación o voluntad del gobernador del Estado, claro a reserva de los hechos y circunstancias que puedan suceder en materia del delito.

Y es precisamente por la razón de la independencia del poder ejecutivo, en el caso, de la Fiscal Sara Bruna Quiñonez Estrada, su renuncia solicitada obedeció a un consejo, o sugerencia del gobernador Rubén Rocha Moya, mas no a una orden girada, según palabras del propio ejecutivo Rubén Rocha Moya.

Por cierto, lo de Sara Bruna Quiñonez pareciera ser una versión repetida de lo que le ocurrió a su antecesor Juan José Ríos Estavillo, a quien el mismo gobernador Rocha Moya le habría sugerido también en su momento, la idea de renunciar voluntariamente a su encargo.

LA BREVE HISTORIA nos indica, que el 14 de marzo de 2017, cuando gobernaba en Sinaloa Quirino Ordaz Coppel, el Abogado Juan José Ríos Estavillo habría sido electo por la Legislatura del Estado en funciones.

Posteriormente ante el pleno de la misma Diputación, el Fiscal electo antes referido, rindió protesta como jefe de la FGJE ante el pleno del Congreso de Sinaloa para un periodo de 7 años.

Sin embargo, el 18 de octubre de 2021, por la consabida sugerencia del ejecutivo estatal Rubén Rocha Moya, el citado jurista decide presentar su renuncia, antes de cumplir con el mandato constitucional.

Así las cosas, sacando cuentas entenderíamos que Ríos Estavillo solo permaneció 4 años 7 meses al frente de la Fiscalía.
Constitucionalmente al conocido abogado sinaloense se le quedaron a deber 2.5 años de labor al frente de la polémica Fiscalía… Hechos y circunstancias se lo llevaron antes.

LA OTRA RENUNCIA.- En el caso de Sara Bruna Quiñonez Estrada, su arribo a los mandos de la FGJE ocurrió el 11 de noviembre del 2021, al igual que su antecesor, para un periodo de 7 años.

Su elección por parte del Congreso del Estado fue de carácter constitucional, por lo que su fecha de salida estaba signada para el mes de noviembre del 2028.

Con su renuncia presentada apenas el pasado 16 de agosto de 2024, las fechas nos indican que apenas permaneció en el cargo 2. 7 años, quedando a deber 4.3 años del ejercicio constitucional para el que fue electa.

Otra vez los hechos y circunstancias, cimbran las estructuras de la FGJE y dejaron fuera del cargo a la titular de la Fiscalía.

Así las cosas, y haciendo uso nuevamente de los números, es posible pensar en que Sara Bruna Quiñonez Estrada, llego al cargo a cubrir una especie de interinato del término constitucional que dejara trunco Juan José Ríos Estavillo.

Y es que, entre los dos titulares de la Fiscalía, apenas complementaron los 7 años para que fuera electo el periodo trunco del antecesor de Sara Bruna… “Es el Karma” diría irónicamente Ríos Estavillo.

Hoy, el Consejo Estatal de Seguridad Publica y el Congreso del Estado de Sinaloa se preparan para elegir a la, o el nuevo Fiscal General.

La convocatoria para el registro de aspirantes podría salir a la luz pública este lunes 19 de agosto.

Se espera que, no obstante la difícil tarea que implica la responsabilidad de encabezar la FGJE en momentos tan cruciales como el que se vive en Sinaloa en materia de delincuencia, habrá una suma importante de hombres y mujeres registrados…

Los hechos y circunstancias que matan obras y acciones y derriban ilusiones, seria lo de menos que podrían pensar los valientes y aguerridos suspirantes… Y quizá tengan razón…Nos veremos enseguidita.