Lo dijo el pasado martes 18 de este caluroso mes de junio, frente a las cámaras de televisión, los micrófonos de las radiodifusoras y las libretas de los periodistas ahí presentes.

Y lo hizo en un tono sereno y reflexivo, tal y como lo hace siempre, es decir, sin olvidar la pretendida franqueza con que usualmente trata de expresarse, cuando les habla a los mexicanos… Sus mexicanos.

La intención de sus palabras, llevan siempre un objetivo, y su rumbo y destino es desde luego impactar en el intelecto del Pueblo… Su pueblo.

Busca el señor, que los ojos que lo ven y los oídos que lo escuchan se convenzan que su palabra solo encierra la verdad y en el mayor de sus receptores lo logra… Es gente noble y bondadosa.

Pretende igualmente dejar constancia ante “su gente”, que en sus expresiones tanto orales como corporales no hay espacio para la falsedad, la hipocresía, y menos la mala intención, ya que la sinceridad y honestidad son su mayor tesoro y estandarte.

Es evidente, el personaje al que me refiero es el Presidente de la Republica Andrés Manuel López Obrador, quien el pasado martes en su conferencia mañanera, habló de lo que será su retiro, una vez entregue de manera oficial los mandos constitucionales de la nación mexicana.

Y, respecto al rincón del suelo nacional que AMLO ha elegido para su retiro mucho se ha dicho, y de todos es sabido que será el municipio de Palenque, uno de los 124 municipios que integran el Estado de Chiapas, donde el aun mandatario posee un rancho o finca de descanso.

Para quien se tome el tiempo y la molestia de leer esta columna, el dato antes señalado nada de novedoso podría contener, porque mucho se ha dicho ya respecto a que será precisamente la enigmática y majestuosa ciudad de Palenque el lugar en donde el líder moral de MORENA se resguardaría en calidad de ex Presidente, de las malas miradas y las lenguas lapidarias que lo perseguirán.

Pero, habría que escuchar y analizar con atención lo que López Obrador dijo el martes 18 de junio desde la mañanera, con relación a su auto exilio chiapaneco.

Y es que muy relevante me parece, haber escuchado al Presidente decir que a partir del primer día de octubre, se retira, no solo de los mandos del país, sino al mismo tiempo de la vida pública nacional.

Asegura AMLO que su tiempo lo dedicara exclusivamente a escribir sus memorias y leer los libros ya elegidos.

Comento en su tradicional conferencia de prensa que se alejará de todo y de todos los que tengan que ver con la política y el gobierno.

Su retiro de la vida pública, informó, será tan discreta y total que no tendrá contacto con otras personas que no sean su familia y asistentes en el famoso rancho del nombre feo.

Y aquí la cereza del pastel; López Obrador aseguró que cuando decida salir de su emblemático rinconcito de cielo, lo hará utilizando medios de transporte personal.

“Nada de viajar el líneas comerciales (Entiendo que se refiere al transporte aéreo, marítimo o terrestre), revelo.

Y llegamos, según mi personal apreciación, al punto de mayor interés y relevancia política, cuando AMLO aseguro que los únicos viajes que hará a la ciudad de México serian para visitar a su esposa Beatriz Gutiérrez Müller.

¿O sea, que, según lo dicho por el Presidente, debemos entender que su señora esposa no se va a vivir a su lado al rancho de Palenque?.

¿Se queda entonces Doña Beatriz a vivir alejada de su marido, supongo que en la Ciudad de México?.

¿Y debemos deducir entonces que si la señora del Presidente se queda en la Capital de la Republica seria para seguir trabajando en la investigación y la academia, y que lo hará desde su status profesional, pero alejada de la actividad política?.

¿Sera entonces posible creer que la señora Gutiérrez Müller, podría permanecer alejada de las decisiones políticas y de gobierno que la nueva Presidenta de la Republica Claudia Sheinbaum empiece a tomar a partir del primer día del mes de octubre de este 2024?.

¿O se podría pensar en la posibilidad de que la Señora López Obrador permanecerá en la vida pública en calidad de representante honoraria de su marido, el para entonces ex Presidente de la Republica?.

Y la última pregunta que en mi caso particular me inquieta es la siguiente:

¿ Podría convertirse Doña Beatriz, durante el nuevo gobierno en el enlace y gran interlocutora entre López Obrador y Claudia Sheinbaum para la toma de las grandes decisiones en aras de dar continuidad a la Cuarta Transformación?.

¿O será acaso que en México y más allacito de nuestras fronteras, existe alguna persona que pueda concebir la idea de que Doña Beatriz Gutiérrez Müller se quede a radicar en la Ciudad de México, al igual que su esposo lo haría en Palenque, alejada y sin injerencia en la conducción del nuevo gobierno?.

Son varias preguntas que por el momento se quedan en el aire, y que solo el fenómeno de la especulación podría responder.

Y es que, no se puede pensar de otra manera, luego de escuchar al Presidente decir que desde su retiro, solo viajara, y lo hará mediante sus propios medios, cuando vaya a visitar a su señora esposa, supongo que a la Capital de nuestro País.

De cualquier manera, la mejor respuesta nos la dará la Presidenta electa Claudia Sheinbaum, cuando termine de alimentar el morbo nacional, dando a conocer el último segmento de su gabinete presidencial.

Y me quedo con el ultimo racimo de preguntas… ¿Debería, o tendría que figurar la Señora Gutiérrez Muller de López Obrador entre las figuras relevantes del nuevo gabinete presidencial?
¿Estaría de acuerdo Claudia Sheinbaum de tener en su estructura de gobierno una funcionaria del tamaño de la esposa del ex Presidente?.

¿Y de ser así, cuál sería el mensaje que la nueva Presidenta estaría enviando a los mexicanos?.

Sin embargo, y sobre todas las cosas, lo interesante seria saber si la esposa de “el que se va, pero se queda”, soportaría estar alejada de la tentación del poder.

Y es que, por mucho poder que una persona tenga, una cosa es figurar en el gran escaparate, y otra muy distinta seria permanecer en la pesada soledad del aislamiento… Nos veremos enseguidita.