La lucha política de México, sigue agregando hojas al libro de su historia, el cual sin duda habrá de servir para la consulta de las futuras generaciones.
Claudia Sheinbaum Pardo logró conquistar la simpatía de millones de connacionales para con su voto convertirse en la primera mujer en asumir la silla presidencial de nuestra república.
Las cifras que ofrece el INE a través del PREP, indican que sufragó el pueblo de México, mayoritariamente por la que consideraron era la mejor oferta y por supuesto la alternativa política viable para seguir por la trazada ruta de la esperanza.
La esperanza claro, de contar con un gobierno justo, libre, humanitario, y solidario con los más desvalidos.
Y ocurrió entonces, que después de largos 77 años en que el Presidente Miguel Alemán Valdez promoviera la iniciativa de reforma al artículo 115 constitucional, para otorgar a las mujeres el derecho a votar y ser votadas, Claudia Sheinbaum logra la gran hazaña.
Me refiero por supuesto a la histórica hazaña de haber logrado lo que hasta no hace mucho tiempo era impensable; Vencer al hegemónico y radical machismo de nuestro pueblo.
Y no menos histórico será atestiguar que por primera vez una mujer se convertirá en la primera Comandante suprema de las fuerzas armadas de México.
Sobre los diversos factores que influyeron y permitieron el triunfo de Claudia Sheinbaum, mucho se ha dicho, se dice y lo seguiremos diciendo y escribiendo.
Por lo pronto, habría que decir, que Claudia, Andrés Manuel y el Partido Morena son los grandes protagonistas políticos del momento, tanto de México como en el mundo entero.
Y es que, en ellos, independientemente de que Andrés Manuel se aleje o se quede cerca de Claudia, es precisamente donde queda depositada la esperanza de los mexicanos.
Pero, independientemente de lo que ocurra, será Claudia, la depositaria de la gran responsabilidad de asumir y enfrentar los enormes retos que implican el gobernar un País como México, con tantos reclamos pendientes de resolver.
Y si de opinar sobre el tema electoral se trata, diría por mi parte, que desde un análisis muy personal, pienso que este domingo 2 de junio, los mexicanos votaron, no tanto por la continuidad de un régimen político, sino en contra de la posibilidad de retroceder a los gobiernos corruptos y criminales del pasado, en cuya lucha, es AMLO quien enarbola esa bandera.
Es de tal manera en ese concepto de mi percepción, donde pienso que descansa el encargo de los mexicanos para con Claudia Sheinbaum Pardo en su calidad de nueva Presidenta de México.
La encomienda de los mexicanos es; Para adelante, todo…Para atrás, nada.
Es ese pienso yo, el mensaje subliminal inscrito en las boletas y depositado en las urnas electorales.
Y la destinataria de tal mensaje, es por supuesto, Doña Claudia, la hoy vitoreada Presidenta electa de México.
JUAN DE DIOS GAMEZ… ELECCION CONTUNDENTE.
Juan de Dios Gámez Mendívil, gano de manera abrumadora la alcaldía de Culiacán, la capital sinaloense.
La manera en que logro superar la prueba del ácido político, lo convierte en la revelación política de Sinaloa de las pasadas elecciones.
Sus detractores ya no le pueden decir que le regalaron la alcaldía de Culiacán, por aquello de que el gobernador Rubén Rocha Moya lo había designado como el alcalde sustituto del destituido Jesús Estrada Ferreiro.
Y quizá para ponerlo a prueba y acallar las críticas, el gobernador decidió lanzarlo por el camino de la política, para que en esta ocasión se ganara a pulso la alcaldía de Culiacán.
Y como buen alumno, Juan de Dios aprendió a caminar y transitar por los difíciles senderos de ese quehacer, conquistando las voluntades ciudadanas, que finalmente se convirtieron en los votos que le otorgaron el, hasta este día, inminente triunfo electoral.
Para conquistar el voto popular, el alcalde con licencia, hizo uso de la personalidad sencilla y de humildad que lo caracteriza y que le reconoce el pueblo “culichi”.
Y por supuesto, Gámez Mendívil explotó el buen papel desarrollado al frente del interinato del gobierno municipal que por casi dos años ejerció.
Hoy, concluida la jornada electoral, y tras su contundente triunfo electoral, las miradas de propios y extraños empiezan a dirigirse a la imagen de Juan de Dios Gámez Mendívil, uno de los hombres de mayor confianza y estima del gobernador del Estado Rubén Rocha Moya en Sinaloa…
Que nadie entonces lo pierda de vista… Las cosas, como son…Nos veremos enseguidita…