Existen dos situaciones comunes que pueden hacer que se pierda el Registro Federal de Contribuyentes, te explicamos cuáles son
El RFC es una clave única alfanumérica compuesta de 13 letras y números para las personas físicas y 12 para las personas morales.
Este documento sirve para realizar cualquier actividad económica en el país y está ligado directamente con el Gobierno.
Además, es necesario para hacer cualquier movimiento de declaración de impuestos y para acceder a productos financieros como cuentas de ahorro y tarjetas de crédito y es uno de los requisitos más importantes para realizar trámites relacionados con impuestos.
Lo que muchas personas no saben, es que este se puede perder y las razones son muy comunes:
Existen dos situaciones comunes que pueden hacer que se pierda el Registro Federal de Contribuyentes, que es de los datos más importantes tanto laboralmente como empresarial en México.
Que el contribuyente no lleve a cabo actividad económica en los últimos cinco ejercicios fiscales.
Durante cinco años no se emitan comprobantes fiscales.
¿Qué sucede si está suspendido mi RFC?
Si tu RFC está suspendido ante el SAT, quiere decir que no estás llevando a cabo actividades económicas, por lo que no estás obligado a realizar un registro contable, ni tampoco a declarar impuestos o emitir comprobantes de pago, como es el caso de las facturas o Certificados Fiscales Digitales por Internet (CFDI).
¿Cómo afecta no tener RFC?
Si tu RFC está suspendido ante el SAT no podrás efectuar actividades económicas con alguna empresa o empleador, trabajar como asalariado, prestar servicios profesionales ni tampoco podrás vender bienes o servicios.
Por ello, es importante que mantengas en orden tus obligaciones fiscales para que no resultes afectada o afectado en caso de que pierdas este importante documento.