Los médicos del presidente de Rusia, Vladimir Putin, indicaron que la salud del ex agente de la KGB está en riesgo desde su presunto ataque al corazón que sufrió el pasado domingo, por lo que ya habrían preparado a sus seres queridos para enfrentar el peor de los escenarios para el mandatario del Kremlin.
Los galenos que atienden la salud de Vladimir Putin señalaron que el presidente sigue enfermo resintiendo el paro cardiaco que se reveló sufrió el domingo, de acuerdo con una fuente inflitrada en el Kremlin del canal de Telegram General SVR citada por el Daily Star. Ante ello, ven pocas probabilidades para que el mandatario pueda recuperarse.
¿Cuál es el estado de salud de Vladimir Putin?
De acuerdo con la fuente, los médicos de Putin estiman un escenario catastrófico para Vladimir Putin quien sigue a la cabeza de la invasión de Rusia en Ucrania desde hacia más de un año y medio, en ese sentido, los doctores preparan a los seres queridos del ex agente de la KGB para que estén listos ante una inminente muerte del líder ruso.
“Estan preparando a sus seres queridos para lo peor“, comentó al fuente dentro del gabinete de Putin, quien desde el domingo presenta complicaciones de salud, que lo ha hecho ocupar a alguna de las personas que actúan como su doble en los actos público que encabeza el mandatario.
“Durante las últimas 24 horas, el estado de Vladimir Putin no ha cambiado y permanece estable y grave”: la fuente en el Kremlin.
¿Qué dice el Kremlin sobre la salud de Putin?
Los médicos hacen todo lo posible para estabilizar la salud el jefe de Estado de Rusia; sin embargo, “no dejan dudas sobre el resultado“, sentenció la fuente consultada por el diario británico, a pesar de que el secretario de prensa de Rusia, Dmitry Peskov, ha desmentido lo que consideró son rumores sobre Putin.
Sin embargo, desde hace semanas Vladimir Putin no ha participado en ningún acto público, pero Peskov insistió: “Esto pertenece a la categoría de fraudes informativos absurdos que toda una serie de medios discuten con envidiable tenacidad; esto no evoca más que una sonrisa”.
Fuente: El Heraldo