El reconocido empresario , Sergio “el pío” Esquer, está viviendo una situación similar al mal de ojo. Al igual que cuando se rompe un huevo durante una limpieza, su presencia en la política parece ser una señal de brujería, indicando que alguien busca hacerle mucho daño.

Esquer, quien se encuentra asustado y desaparecido tras sufrir una derrota electoral, cuenta con defensores y asesores como Kechu Ramírez y Óscar Lara Jr. Sin embargo, su desempeño como empresario contrasta con su pésimo desempeño como político, cambiando de partido según le convenga.

El pillo Esquer busca ganar perdiendo, aspirando a ser candidato al senado y desbancando a figuras importantes como Mario Zamora, Malova, candidato de la dirigencia estatal del PRI, y Marcelo Ebrard. Sin embargo, la ciudadanía parece estar dispuesta a hacerle mucho daño, ya que reconocen que su candidatura solo traería más problemas.

Siguiendo con la analogía del mal de ojo, se puede decir que el pillo Esquer ahuyenta incluso a su ángel de la guarda. A nivel psicológico, aún no se recupera de la derrota electoral pasada, y en lo espiritual, su presencia genera sensaciones negativas. En lo físico, no ha mostrado compromiso ni trabajo en el terreno político.

En resumen, Sergio “el pío” Esquer es un huevo extraviado en la política. Su presencia genera malas vibraciones y parece ser una señal de brujería. Mientras Morena y el Movimiento Ciudadano podrían estar contentos con su aspiración, la ciudadanía reconoce que su candidatura solo traería más problemas. Esquer es un huevo que podría ser dejado para el perro, mientras otros candidatos más competentes toman el liderazgo.