La guerra política por la sucesión presidencial se ha puesto en marcha de manera anticipada…. Esta candente.
El pastel político a repartirse está integrado por 128 Senadores, 500 Diputados Federales, 9 gubernaturas, y la CDMX, 31 Congresos locales, y 1580 Ayuntamientos.
Ello explica el alto grado de la efervescencia política, misma que sin duda se irá incrementando conforme los días nos vayan acercando al 2 de junio del 2024, fecha del proceso electoral.
Y es precisamente la intensidad que ha cobrado la jornada electoral, la que está dejando al descubierto la verdadera personalidad de los diversos actores que desde todos los flancos políticos luchan por los espacios de poder en juego.
Ya no hay amor, agradecimiento ni lealtades al Partido político que en días pasados los cobijara y les diera espacios para la conquista del poder.
Hoy, vivimos nuevos tiempos…Son otros tiempos, donde las amistades, compadrazgos, camaraderías, viejas alianzas, pactos y compromisos políticos contraídos, se han venido derrumbando, mientras amenazantes por la traición y el olvido, se estremecen otros.
Y todo de frente al reacomodo, no de preceptos ideológicos, sino más bien, motivados por los intereses personales de permanecer adheridos al poder público.
Pero ello no solo ocurre en los Partidos en desgracia y con tiempos desfavorables, sino también en las esferas políticas donde se vive la bonanza, como es el caso de MORENA.
Y es que, quienes consideren que en torno a MORENA y sus altos jerarcas las cosas transitan por aguas tranquilas estarían en un error de apreciación.
Y no me refiero en este caso al tema de Marcelo Ebrard y sus rutas políticas indefinidas en la lucha que todavía trata de librar por la candidatura a la Presidencia de México.
El hecho al que hago alusión, se refiere a una especie de guerra interna que se libra en MORENA por la candidatura al gobierno de la Ciudad de México.
El hecho ha permeado a la opinión pública, no obstante los intentos que se hacen por ocultarlo, dada la envergadura de los personajes centrales involucrados en el conflicto.
Y decirlo se hace necesario, ya que los actores inmersos en esa lucha soterrada, son nada más y nada menos que el propio Presidente Andrés Manuel López Obrador y su candidata a sucederlos en el trono, Claudia Sheinbaum Pardo.
CLAUDIA, lucha con todo su poder por imponer en la candidatura de MORENA a su amigo, aliado y protegido Omar García Harfuch.
Por su parte el Presidente Andrés Manuel López Obrador, no esconde su simpatía por la Presidenta municipal de Iztapalapa Clara Brugada.
Y aunque AMLO trata de ocultar su indisposición para que la candidatura recaiga en Herfuch, su intento ha sido vano, ya que ha trascendido que en el fondo no comulga para nada con esa posibilidad.
Por cierto, los ataques externos, y peor aún, los que se han generado al interior de MORENA en contra de Omar García Herfuch, por su presunta injerencia en el caso Ayotzinapa, han sido golpes letales en contra de sus aspiraciones y han originado diversas interpretaciones.
Y precisamente, sobre esos ataques en contra de Herfuch, no faltan quienes se preguntan, si esos misiles mediáticos, son planeados y ejecutados con, o sin el consentimiento o permiso del Presidente AMLO.
La pregunta es difícil de responder, aunque no faltan los mal pensados que consideran que en Morena nadie se mueve sin la anuencia del líder mayor.
Lo cierto de las cosas, es que los ataques en contra de HERFUCH han molestado en gran medida a Claudia Sheinbaum, lo que dicen, lejos de desanimarla a empujar el proyecto de la candidatura de su propia “corcholata”, la ha motivado a tomarlo ya como como un reto a lograr.¿
Pero, lograr un reto, por encima de los presuntos deseos y los planes del Presidente López Obrador? … Seria, creo yo, una acción aventurada y una decisión temeraria.
En tal caso la pregunta se vuelve necesaria ; ¿Tan importante es para Claudia Sheinbaum el llevar a García Herfuch a la candidatura y luego a la gubernatura de la Ciudad de México, como para retar y enfrentar al poder que ostenta Andrés Manuel López Obrador?.
Y la última pregunta sería: ¿Cuál será el desenlace final de esta primera e interesante presunta controversia política entre el Presidente en funciones y su posible sucesora?.
Por nuestra cuenta, creemos, que si Omar Gacia Herfuch logra finalmente la candidatura, sería la mayor certeza de que, AMLO le entrego a Claudia Shenbaum el BASTON DE MANDO con todos los atributos y privilegios, y que en efecto, será respetuoso de las decisiones que la candidata decida tomar.
Pero, si por otra parte, la candidatura recae en Clara Brugada, Hugo López Gattel, el gran mensaje político seria que AMLO si meterá las manos y todo el cuerpo, no solo en esa, sino en la selección de todos los candidatos y candidatas de MORENA.
Y, que por supuesto como muchos piensan, al término de su mandato, el hoy inquilino de Palacio Nacional no tiene pensado irse a descansar a su rancho de Palenque en Chiapas.
Aunque claro, si en esa lucha por la candidatura al gobierno de la CDMX la relación entre AMLO-SHEIMBAUM se crispa y se hace necesario e indispensable buscar una salida airosa al problema, que nadie se sorprenda si salta a la palestra Mario Delgado Carrillo…
En tal caso, AMLO le diría a SHEIMBAUM… Bueno, está bien Claudia… Ni pa’ ti, ni pa’ mi… Que sea Mario… ?Seria en tal caso una estrategia?.. Nos veremos enseguidita.
