La militancia del PRI, tan golpeada, esperaba un trabajo político más efectivo, entregado, que asentara las bases para darles la confianza necesaria y que a pesar de las derrotas y de sus malos dirigentes sigue firme en sus convicciones.
Ni pensar que pudieran recuperar a los “militantes” que al primer desaire, cambiaron de rieles.
La participación del PRI Sinaloa en el Frente Amplio por México, se siente que nada tiene que aportar excepto su voto duro, que con o sin estos dirigentes, responderán con ese proyecto nacional.
Y porqué de estos comentarios, dijeran algunos. Se basan en que no hay trabajo político o social, su actuar ha sido cuadrado, sin chispa, sin brillo.
No se ha nombrado ni a la primera línea de trabajo como son sus Comités Municipales, ha dejado que sigan sangrando su ya de por sí limitado presupuesto, figuras como Chuquiqui Hernández, Homobono Rosas, entre otros, mucho menos ha llamado a cuentas al dirigente saliente.
Hemos visto la dirigencia actual sin garbo, no se diga para controlar, sino para formar alianza o su definición con los Diputados Locales que le quedan.
El PRI no sabe cómo ser oposición, y deja que Morena tenga un contrincante menos en este proceso.
Su joven dirigencia no ha respondido a la salida abierta de algunos de sus cuadros, se le ve sin ideas, sin un plan definido de trabajo.
Tenemos que en Culiacán, Mazatlán y otros municipios, sin malicia política, sus novatos dirigentes no han elaborado estrategia para atender y no permitir el que algunos cuadros que se fueron pudieran estar trabajando con los pocos militantes que le quedan.
¿Le quedará tiempo al PRI Sinaloa para ser competitivo este 2024? sus militantes tienen la palabra.
No ha acertado la dirigencia socializar donde estarán ubicadas las casillas para que voten los registrados este 03 de septiembre.
Con ésta dirigencia del PRI, MORENA en Sinaloa le rendirá buenas cuentas a AMLO.
Nos vemos en otra entrega. ICL