México, es una vez más el gran trofeo en disputa…Es el mismo México, descubierto y luego conquistado hace varios siglos por hombres ambiciosos y llenos de avaricia venidos desde lejanos horizontes para arrebatarnos lo nuestro.

Es el mismo México, fuente inagotable de riqueza que los grandes saqueadores de ayer y hoy, pese a sus despiadados esfuerzos no se han podido acabar.

Es el mismo México, al que las diversas clases y castas políticas, inspiradas y personificadas en simbólicos Aladinos, de la noche a la mañana, han logrado amasar grandes fortunas.

Aladinos modernos de carne y hueso, que dan vida a un cuento real, en cuya historia los protagonistas no han requerido de la magia del “Genio milagroso” del cuento Chino, para apoderarse de las grandes riquezas que posee nuestro gran País.

Y es que los “ALADINOS” de nuestros días, no necesitan de los favores del místico GENIO, ya que su naturaleza humana los ha provisto de un gran INGENIO para idear las rutas y estrategias de acción que ellos saben, los conducirán hasta donde se ubica el botín anhelado.

Insisto entonces, es nuestro México, otra vez, el gran botín que los grandes y poderosos grupos de poder se siguen disputando.

Hombres y mujeres, arropados e impulsados por sus grupos de simpatizantes, pero motivados por sus propios sueños y anhelos, se han lanzado a la gran hazaña de todo político, que no es otra cosa que la conquista del poder presidencial.

Lo interesante y lamentable de las cosas, es que la mayoría de las, y los aventureros de la gran lucha política que habrá de librarse en el 2024, parecieran haberse inspirado en la magistral frase de una canción de Joaquín Sabinas, que reza…”Que gane el QUIERO la guerra del PUEDO”.

Así las cosas, todas y todos los aspirantes presidenciales, atendiendo el mensaje del trovador Español, QUIEREN, pero no todas, ni todos PUEDEN.

¿Por qué entonces, quienes saben que en realidad NO PUEDEN, se resisten a mostrar su congruencia y madurez para aceptar su propia realidad política?.

¿O es que acaso el autoengaño ha pasado a ser una virtud de la clase política contemporánea?.

En el caso de las CORCHOLATAS, sabemos que al menos tres de los que QUIEREN, no PUEDEN.

Así expuesto, podemos entender, aunque nunca justificar, que su permanencia en la lucha por la presidencia obedece al regalo de consolación que pactaron al momento de ser inscritos en la lista de los SEIS.

En lo referente al Frente Amplio por México, pese a que la kilométrica lista de las, y los que simplemente QUIEREN, se ha reducido, pero sigue siendo lastimosamente abultada.

Ante tan interesante escenario político, el impulso de las preguntas se hace sentir y emergen en este, mi espacio de opinión.

¿Por qué razón, al menos las tres CORCHOLATAS que van tan rezagadas en las preferencias ciudadanas, como son Gerardo Fernández Noroña, Ricardo Monreal y Manuel Velasco, en un acto de madurez política y congruencia partidaria no han declinado a favor de cualquiera de las tres cartas punteras, y así enviar un mensaje de unidad en torno a MORENA?.

¿Sería acaso, una decisión de esa naturaleza tomada como un acto de desobediencia o rebeldía por parte de la dirigencia morenista?.

De manera personal creo que por el contrario, ese acto sería una manifestación de congruencia, y tendría que ser valorada, e incluso aplaudida por los liderazgos de ese Partido.

En lo que al Frente Amplio por México se refiere, el problema se torna mayor, ya que hasta el día de ayer lunes 7 de agosto, eran 13 los que se habían inscrito para buscar la candidatura presidencial por la alianza PAN-PRI-PRD, aunque de última hora el Senador Panista Jorge Luis Preciado habría optado por bajarse del carro de la competencia.

De tal modo que siguen siendo 12 las y los personajes que le han apostado al QUIERO en la guerra del PUEDO.

Ante ese panorama, otra vez el impulso de las preguntas se hace presente.

¿Dónde han quedado el buen entendimiento, la cordura, mesura y la necesaria inteligencia de por lo menos 9 de los 12 Frentistas que siguen en la infructuosa pelea y no quieren ver la realidad que los envuelve?.

¿ Por qué motivos no se bajan de la contienda y anuncian su incorporación a la lucha de quien, o quienes encabezan la lista de las preferencias, para así fortalecer su lucha?.

Si así lo hicieren, el QUIERO de quien resulte ser la candidata o el candidato, tendría al menos una mayor posibilidad de demostrar al resto de sus aliados e impulsores que si entraron a la guerra del QUIERO, es porque PUEDE… Nos veremos enseguidita.