Con las reformas que penalizan las terapias de conversión, se tiene un marco legal más operativo y se quitan barreras que no permitían a integrantes de la comunidad LGBTTIQ+ el goce de sus derechos, además de que se escucharon todas las voces, señalaron diputadas de Morena y del PAS.
En la discusión de las reformas al Código Penal para establecer multa y cárcel a quienes usen violencia, maltrato y otras conductas que violentan los derechos humanos, la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y Familia, Almendra Ernestina Negrete Sánchez, afirmó que incluso ahora Sinaloa rompe paradigmas.
Se avanza, dijo, en un Estado de Derecho, tutelador y garante del interés superior de las niñas, niños y adolescentes, y que pone en el centro a las familias.
Las reformas aprobadas, aseguró, son de avanzada y se ha retomado lo más importante de todo lo propuesto para poner a Sinaloa a la vanguardia, y que incluso incluye el contenido de la “Ley Sabina”.
Agregó que también se dota de un marco legal más operativo y se avanza en apoyo a jueces de primera instancia de lo Familiar para que cuando juzguen, tengan más herramientas a favor de las infancias.
La diputada María del Rosario Osuna Gutiérrez, secretaria de esta misma Comisión, señaló que el Congreso del Estado está obligado a impulsar las acciones legislativas necesarias que contribuyan a proteger y garantizar los derechos humanos de las personas que tienen una orientación sexual, identidad de género o expresión de género diversa.
“Los esfuerzos para corregir la orientación sexual, identidad o expresión de género de manera violenta deben condenarse”, dijo.
Además, añadió, el dictamen correspondiente también tomó en cuenta opiniones, testimonios y análisis de la comunidad LGBTTIQ+, de pastores, docentes, sicólogos y especialistas.