Feliciano Castro Meléndrez, Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, aseguró durante en su participación en tribuna en el marco de la instalación del “Parlamento Juvenil 7 de Abril”, que las luchas estudiantiles de 1972 son la herencia a rescatar, por lo que exhortó a las y los jóvenes sinaloenses a tomar el control de las universidades y no permitir que ninguna fuerza externa las controle.
En su intervención, Feliciano Castro pidió un minuto de silencio en la memoria de María Isabel Laneros y Juan de Dios Quiñónez, jóvenes universitarios que murieron asesinados durante el movimiento estudiantil de Sinaloa el 7 de abril de 1972. En el recinto estuvieron presentes el Secretario General de Gobierno Enrique Inzunza Cázares en representación personal del Gobernador Rubén Rocha Moya, así como el Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia de Sinaloa Jesús Iván Chávez Rangel
Recordó que aquellos jóvenes luchaban por la justicia y por transformar la realidad en Sinaloa, sin embargo la respuesta fue su asesinato. Resaltó que LXIII legislatura haya tenido a bien emitir un decreto para que se llevase a cabo este parlamento justamente con ese nombre: “Parlamento 7 de abril”, pues consideró que la historia debe estar en nuestro presente, y debemos aprender de ella pues viene a dar mucha luz sobre los acontecimientos que hoy estamos viviendo
Ante las y los diputados juveniles que protestaron como integrantes del Parlamento Juvenil 7 de Abril en su edición 2023, el también Coordinador del Grupo Parlamentario de Morena revindicó que el reto de la historia es que sean precisamente las y los jóvenes quienes tomen las instituciones de educación superior en sus manos para garantizar el acceso libre a la educación universitaria para todos y todas.
“Entre la simulación y la verdad, creo que podemos construir nuestro primer consenso: hablemos con la verdad y la verdad muchas de las veces es cruel, la verdad social duele. En ese sentido, nuestra primera invitación es que dejemos la simulación de lado y planteamos en estos debates la realidad así de cruda como es, para poder justamente darle el tratamiento adecuado”, dijo Feliciano Castro.
Recordó que el movimiento de 1972 fue un movimiento de estudiantes, profesores y trabajadores comprometidos con la universidad y el derecho a la educación, a la libertad que supone la autonomía, y luchaban por sacar de la universidad a un rector que les había sido impuesto.
“Tengan presente esa historia y aprendan de ella para que tengan luz de los acontecimientos que hoy se están viviendo. Decir que la política es ajena a la disputa por el poder y los intereses de distintos representaciones y grupos sociales, es engañarnos, es simular; y en esta perspectiva me atrevo a hacerles una sugerencia: cultiven su pertenencia ideológica. La pertenencia ideológica supone tener un sentido de compromiso con el país a partir de garantizar los intereses de las mayorías y de garantizar el sentido ético, el comprometerse para combatir la desigualdad social, para combatir la pobreza, eso es afirmar un sentido de pertenencia ideológica y no se puede estar en la ejerciendo la política si carecemos de un sentido de pertenencia ideológica”, reflexionó Castro Meléndrez.
“Que la generación del conocimiento no esté limitada ni por poderes políticos de gobierno y tampoco por fuerzas internas al interior de las universidades, que limitan justamente la libertad de los universitarios, para que desde su propia condición puedan determinar esos procesos, así como los procesos de autogobierno Las universidades deben estar en manos de los universitarios. Ninguna fuerza, ni externa ni interna, debe tener el control de la universidad porque eso es negar el derecho a la educación. A eso están convocados, tomen en sus manos las universidades si de universidades autónomas hablamos, de eso se trata y ese es el reto de la historia”, concluyó Feliciano Castro.