Sindicalismo, es el movimiento y el sistema que permite la representación de los trabajadores a través de una institución conocida como Sindicato esto, con el objetivo de optimizar la situación de los trabajadores en el mercado laboral.
Desde 1989 y de manera constante, el movimiento sindical mexicano se ha debilitado tanto que, en la actualidad, tan solo un porcentaje mínimo de la población económicamente activa está organizada sindicalmente.
Y ¿por qué hablar de un sindicalismo perdido?, pues en ocasiones exigen más de lo justo. Al momento de negociar con el sindicato puede que se quieran pasar de listos y exijan más de lo necesario, lo que puede provocar un descontento por parte de ambos, súmele, que se politizaron estos al paso de los años.
El fracaso de la política laboral y de las relaciones con los sindicatos es total, el actual gobierno determina sus decisiones a cualquier costo. No les interesan los trabajadores, donde no imperan sus aliados, le ponen una cuña, para que dejen de tener fuerza. El dicho “divide y venceras” se aplica muy a menudo.
Hoy día, es una tarea difícil entender una democracia al interior de los sindicatos, nadie lo cree, y quienes aspiran a dirigirlos, no pasa por sus mentes por conveniencia. Considerar a los sindicatos en una esfera democrática, es casi irreal, puesto que el choque normal es de buscar apropiarse de el, y dejar atrás su verdadera eficacia. No importa el cómo. Si no sus beneficios.
En un mundo ideal, los sindicatos y su herramienta fundamental, el derecho de huelga, no existiría si la patronal no afectara los derechos laborales. sin embargo la historia nos ha enseñado que un patrón sin contrapesos, acaba preocupándose sólo por incrementar sus márgenes de ganancia. Este derecho a huelga en la mayoría de los sindicatos es un mecanismo de iure pero de facto, ya que solo es conciliador, no busca la defensa real, últimamente, ha perdido su total sentido.
En conclusión, el sindicalismo en su esencia, busca mejorar las condiciones de vida, de trabajo y contribuir a la transformación de la sociedad, tiene plena vigencia, pero necesita superar la crisis de sus objetivos, métodos de acción, estructura y funcionamiento; que fueron eficientes en el pasado, dejando atrás los objetivos personales y llevando a cabo los reales de su fundación sindical, de no ser así, no tienen ninguna razón su existencia.
Es cuanto…
