Celebremos el estar vivos y junto a quienes amamos. La Navidad es buen momento para revisar y depurar expectativas.
Por Guillermo Bañuelos
No tener dinero suficiente para adquirir lo deseado puede ser un motivo para ser infelices. Cuidado. Así es cuando el comprar y tener, más que ser, es nuestro motivo principal de vida.
Terminamos un año atípico, de pérdidas de todo tipo, de enfermedad y luto, lo que en muchos provoca desasosiego y depresión.
Las familias mexicanas vivímos tiempos particularmente difíciles. Tiempos de pandemia que nos impiden sepultar a nuestros muertos -tántos muertos- y ni siquiera despedirnos de ellos.
Para dimensionar lo que acontece en lo económico, citemos los resultados de la Encuesta Telefónica sobre COVID-19 y el Mercado Laboral (ECOVID-ML) hecha pública por el INEGI el 22 de diciembre. Veamos: en el 61.2% de las viviendas encuestadas hubo una disminución de sus ingresos, lo que obligó a las familias a vender sus bienes y/o pedir préstamos.
Apenas declarada la pandemia, en abril, el 37.4% de las viviendas optaron por deshacerse de sus bienes o pedir prestado para solventar sus gastos fijos.
Para mayo, este porcentaje se incrementó al 40.2%, mientras en junio aumentó al 41.8%. Un mes después -julio-, prácticamente en 5 de cada 10 viviendas del país en las que se redujeron los ingresos tuvieron que endeudarse.
Según el análisis de la encuesta, la reducción de ingresos en los hogares mexicanos fue ocasionada por la pérdida de los empleos, pues en el 30% de los hogares alguno de sus miembros perdió su trabajo a principios de la emergencia sanitaria.
Un bajo porcentaje recibió algún tipo de apoyo del gobierno. En junio ocurrió así en el 7.9% de los casos y en julio, en el 6.6%, pero un 4% de los desocupados en los últimos tres meses recibieron apoyo de algún familiar.
No queda claro cuándo terminará la pesadilla. No hay luz aún al final del túnel. Las instituciones, inclusive, sostienen un tratamiento de la pandemia similar al mantenido desde el inicio de la misma.
Mientras tanto, se incrementan los contagios y el sector público no ve necesario tampoco diseñar un programa de apoyos a las empresas para impedir los despidos de personal. Aún así, el gobierno admite que la situación puede empeorar en todos los aspectos
¿Qué hacer ante esto desde el ámbito personal y familiar?
-Para lograr dejar de beber y su recuperación, los miembros de la organización Alcohólicos Anónimos (A.A) emplean una herramienta sencilla y altamente eficaz: cada día declaran el propósito de no recaer en la bebida ‘SÓLO POR HOY’ (24 horas), y un altísimo porcentaje de ellos lo logra.
Buscar ayuda profesional para mantener la cordura y la esperanza puede brindarnos herramientas útiles. Mientras, este día, proponernos estar en paz SÓLO POR HOY quizá sea útil. Es altamente probable que sí.
Tras reunir una significativa cantidad de material reciclable, la comunidad de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) se convirtió...