El Congreso del Estado de Sinaloa develó en el Muro de Honor del Salón de Sesiones, la divisa con letras doradas “Al Movimiento Estudiantil de 1968, 2 de Octubre No se Olvida”, como un signo de reconocimiento, homenaje y justicia de los sinaloenses hacia las víctimas de esos sucesos.
En la develación de las letras doradas, estuvieron las diputadas, Graciela Domínguez Nava, Roxana Rubio Valdez y el diputado Sergio Jacobo Gutiérrez, presidentas, de la Junta de Coordinación Política, Mesa Directiva y coordinador del grupo parlamentario del PRI, respectivamente.
Presentes también Enrique Inzunza Cázarez, presidente del Supremo Tribunal de Justicia y de Gonzalo Gómez Flores, Secretario General de Gobierno, representante del titular del Poder Ejecutivo del Estado.
En Sesión Solemne realizada este viernes, a 52 años de esos hechos, diputadas y diputados de distintos partidos políticos recordaron lo que también se conoce como “La Matanza de Tlatelolco” y se pronunciaron porque nunca más se vuelvan a repetir esas escenas.
El dictamen que dio origen a las letras doradas fue aprobado en sesión ordinaria el 7 de noviembre de 2019, siendo elaborado con dos iniciativas: una de MORENA, que propuso la frase 2 de Octubre No Se Olvida y la segunda por el PRI, quien planteó Al Movimiento Estudiantil de 1968.
En la fundamentación del dictamen se reconoció que la aportación del movimiento estudiantil a la vida nacional representó un acto fundacional del México Contemporáneo al generarse a partir de entonces la búsqueda de una profunda transformación en la vida política, cultural, social y educativa de nuestro país tendiente a fortalecer las libertades, la democracia y el desarrollo.
En la sesión de este viernes, Graciela Domínguez Nava, coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena, recordó que en aquel día “el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz asesinaba estudiantes, los encarcelaba, los desaparecía”.
Las víctimas, precisó, exigían justicia para el pueblo, democracia y libertad.
“Aquellos acontecimientos fueron tristes porque fue una emboscada a una multitud pacífica y alegre que dejó muchos cadáveres ese día en la Plaza de Tlatelolco y en otras plazas y escuelas en los meses previos,”, recordó.
Era un gran movimiento popular tan legítimo, tan esperanzador, tan generoso, agregó, que pronto se convirtió en motivo de lucha combativa.
El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, Sergio Jacobo Gutiérrez, citó las principales demandas de aquel movimiento estudiantil:
“Exigencia de libertad de presos políticos, derogar el delito vigente de disolución social — eufemismo para contener la libertad de expresión y para reprimir a las disidencias–, y extinguir el cuerpo de granaderos, que era el instrumento de represión gubernamental”.
El Movimiento Estudiantil del 68, afirmó, es una parte fundamental de la historia del México Contemporáneo, y es un patrimonio colectivo, no es patrimonio de ninguna fuerza política ni de ningún partido.
Jorge Iván Villalobos Seáñez, coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, afirmó que el 2 octubre de 1968 fue el acontecimiento histórico en México más traumático, doloroso y sangriento que ha vivido nuestro país, después de la Revolución Mexicana.
“Es un grano honor –dijo–, reafirmar nuestros ideales partidistas de la defensa de la democracia, de los derechos humanos y las libertades individuales y sociales, principios y pilares que se edificaron en nuestro país para preservar la paz, la tranquilidad y el orden”.
El coordinador del Grupo Parlamentario del PT, Mario Rafael González Sánchez, calificó esos sucesos como una desgracia en nuestro país.
“El 2 de octubre queda en la memoria de México como una herida en el corazón. No permitamos que regrese jamás la represión por las fuerzas militares, jamás por las policías”, expresó.
Karla de Lourdes Montero Alatorre, diputada sin partido, lamentó que ese 02 de octubre de 1968 el gobierno haya decidido cobardemente enfrentar y no afrontar el conflicto, recurriendo al caos y la provocación que costó la vida de cientos de civiles y militares.
Hoy, dijo, los jóvenes tienen que lidiar con niveles de inseguridad jamás vistos, los feminicidios de mujeres calcinadas reflejan una ausencia total de valores y la falta de oportunidades laborales les mantiene en la incertidumbre sobre su futuro.
El diputado del PRD, Édgar Augusto González Zatarain, expresó que al poner en letras de oro la divisa que representa a la Generación del 68, es reconocer a la juventud como impulsora de las transformaciones sociales y a su crisol: la universidad.
Esa generación, afirmó, al igual que las generaciones anteriores, lucharon y dejaron pasar, transformaron. “Este es el gran aprendizaje y de quienes educan con el ejemplo”.