¡Hola!
Es para mí un gusto poder saludarte de nuevo, amigo lector, tenía tiempo sin escribir este espacio por motivos netamente laborales, pero ahora con tantas cosas que han sucedido en este caótico e impredecible 2020, nos estamos creando un espacio para poder retomar este ejercicio de opinar y escribir al respecto de lo más interesante que sucede en el mundo deportivo, tanto a nivel nacional, como internacional.
No podemos negar que este mes de junio ha estado movido (como todos los demás meses), y si bien el Covid19 ha sido una desgracia para el 95% de la población mundial, hay uno que otro desbalagado que está sacándole provecho para generar unos cuantos pesos (o bueno, en este caso dólares), los cuales llenarán las arcas de muchas personas, directa e indirectamente involucrados al tema.
Estamos hablando de la siempre polémica y últimamente muy mediocre Liga BBVA; antes llamada Liga MX, proyecto que fue lanzado en el 2012 como una “refrescada” al antiguo sistema de competencia mexicano.
Si bien seguimos viendo las liguillas donde se premia a la mediocridad y al oportunismo, en lugar de premiar al que fue constante y punteó el campeonato durante 17 jornadas, sí encontramos algunos cambios que le dieron más emoción a la única fase que importa en el torneo como lo es la liguilla, vimos el nacimiento del criterio del “gol de visitante”, además de la devaluada “Copa MX”, la cual se nos va al refrigerador un año como mínimo.
Sin embargo, seguimos viendo lo mismo, el producto se ha mantenido igual, y el modus operandi de estos hombres de pantalón largo es el mismo cuando se necesita dinero (¡¿más?!), es mudar franquicias por todo México, cual gira nacional del circo de tu preferencia.
En esta ocasión, y aprovechando la situación Covid19, la Liga MX hizo un movimiento muy repentino y prácticamente atestó un golpe seco a la afición del Monarcas Morelia, un equipo tal vez no muy exitoso o reconocido a nivel nacional, pero que tenía bastantes años jugando en la ciudad de Morelia, y prácticamente era considerado uno de los equipos “inamovibles” del fútbol mexicano, además de ser protagonista de infinidad de Memes que hacían creer que nuestro balompié giraba en torno al equipo purépecha.
De la noche a la mañana, se dejó venir como avalancha la serie de rumores y versiones de que Monarcas Morelia se mudaría a Mazatlán, una ciudad cuya única conexión al fútbol profesional eran los Gallos Marinos de la Tercera División, una ciudad que vio nacer en el 2017 el proyecto de un Estadio muy bonito a las afueras del Puerto hacia el final de la Avenida Múnich; un inmueble que entra en el top 5 de México pero que carecía de un equipo profesional que pudiera llamarlo “hogar”.
Y fue ahí cuando Televisión Azteca encontró su área de oportunidad, un oasis en medio del desierto luego de arrastrar años y años de deudas con el equipo instalado en Michoacán, y con la chance de iniciar de cero y tener un nuevo amanecer en una de las ciudades más bellas de México: Mazatlán.
Cual derecha de Mike Tyson, la afición de Monarcas lo recibió en el mentón y se fue directamente a la lona, sin disparo de advertencia, sin aviso previo, TV Azteca simplemente agarró sus cosas del Estadio Morelos y perfiló rumbo al puerto sinaloense, poco importaron los 70 años de vida de los purépechas, simplemente vieron el signo de pesos y adiós que te vaya bien.
Esto nos deja una valiosa y muy importante lección: en México estamos a años luz de ser un país “futbolero”, es una mentira que el fútbol es parte de la cultura mexicana, es mentira que aquí se vive por los colores, ¿cuáles?, solamente hay seis equipos que tienen segura su plaza: América, Chivas, Pumas, Cruz Azul, Tigres y Rayados… ¿el resto?, ni para qué encariñarse con ellos, no tardarán en mudarlos a donde mejor paguen los inversionistas.
Es más, la dejamos fácil, en México se les llama franquicias a los equipos, ¡FRANQUICIAS!, eso no es un término muy futbolero que digamos, ¿no creen?.
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Hay países más atrasados que México en términos de desarrollo económico y social, y sin embargo, ¡se respetan a los equipos!
En Argentina los clubes tienen arraigo y apego en la sociedad porque representan a un sector de las ciudades o a una subcultura del argentino, la AFA tendrá mil y un defectos, pero los clubes y las camisetas se respetan.
¿Cuándo se ha visto que en Europa se muden equipos a otras ciudades? Allá no existen los “cuadernillos de requisitos” que necesita un equipo para jugar en Primera División, así el equipo juegue en una ciudad de 5,000 habitantes y en un estadio para quinientas personas, si te ganaste el ascenso deportivamente al Máximo Circuito, ¡juegas porque juegas!
Allá no hay discriminación por estadios o por pueblos que apenas y tengan tres calles de longitud, los poderosos e importantes llamados PSG, Bayern Múnich, Juventus de Turín, FC Barcelona, el Real Madrid, el Manchester United… Todos ellos jugarán en los campos más insólitos de Europa porque ese equipo que juega en ese lugar al que en México le hacen feo, se lo ganó a pulso, y merece tener esa experiencia.
Por situaciones como estas, donde nuestra Liga premia la mediocridad y la generación de billetes por encima del nivel deportivo y la competitividad, es que seguimos quedándonos donde mismo en los Mundiales, y es por eso que los futbolistas convocados a la Selección Nacional siguen siendo los mismos, así de simple.
Aquí concluye la primera parte de esta entrega, no todo es malo, y en la próxima edición abordaremos ahora los puntos positivos de que en Mazatlán se juegue fútbol de máxima categoría.
Estamos pendientes y es un gusto volver por estos lares.
Hasta la próxima.
