El pleno del Congreso del Estado aprobó actualizar, para 2020, los valores unitarios del suelo y de las construcciones de los 18 municipios, con lo cual el Impuesto Predial Urbano tendrá un ajuste del 2.5 por ciento, por debajo del índice inflacionario.
Previo a la votación de los dictámenes, la presidenta de la Comisión de Hacienda Pública y Administración, María Victoria Sánchez Peña explicó que al recibir de los municipios sus respectivas iniciativas, hicieron un análisis pormenorizado de las mismas.
Ello permitió, dijo, encontrar que los municipios de Ahome, Mazatlán y Escuinapa realizaron incrementos en el Uso de Suelo, de acuerdo al procedimiento establecido en la Ley de Hacienda Municipal y la Ley de Catastro, ambas del Estado de Sinaloa, los cuales fueron de 3.19, 3.55 y 3.41 por ciento, respectivamente.
Agregó que a excepción de Badiraguato; que no aumentó los valores de las construcciones, los restantes 17 municipios incrementaron los valores de las construcciones en promedio del 5.56 por ciento.
Sin embargo, prosiguió, los municipios de Ahome, Salvador Alvarado, Mazatlán y Escuinapa realizaron incrementos en promedio por debajo del resto de los municipios, con un 3.0, 4.31, 3.63 y 3.38 por ciento, respectivamente.
Sánchez Peña manifestó que la inflación anualizada del año 2018 fue de 4.28 por ciento con una tasa promedio mensual de inflación de 0.38 por ciento.
De enero a noviembre de 2019, agregó, la inflación se colocó en niveles del 2.5 por ciento con una Tasa Promedio Mensual de 0.21 por ciento.
“Estas variables dieron pauta a la valoración cuantitativa sobre la determinación del porcentaje que hoy se propone: 2.5 por ciento”, enfatizó.
Y sólo por mencionar el dato, puntualizó, la inflación en noviembre de este año fue de 2.9 por ciento.
La presidenta de la Comisión agregó que en los criterios generales de Política Económica para el ejercicio fiscal 2020, se proyecta un cierre de la inflación anualizada para este 2019 de entre 3.0 y 3.5 por ciento.
La proyección para el próximo año, añadió, es que la inflación fluctué en una banda de entre el 2.5 y 3.5 por ciento, con una meta proyectada anualizada menor al 3.0 por ciento.
“Es decir”, mencionó, “no estamos fuera del rango de los parámetros de dichos criterios”.