El Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso del Estado de Sinaloa manifestó su respaldo al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en su postura ante la amenaza de su homólogo norteamericano Donald Trump, de imponer un arancel del 5 por ciento a todos los productos nacionales en represalia por el tema migratorio.
La diputada Guadalupe Iribe Gascón solicitó al gobierno federal desplegar de manera urgente todas las acciones de carácter diplomático que sean necesarias para buscar una salida a través del diálogo y la negociación a este grave problema para la economía nacional y regional.
“En estos momentos en el que el país es agredido por una estrategia ofensiva del país vecino, hay que hacer un lado las diferencias políticas y partidistas, hay que cerrar filas con el Presidente y unirnos todos para la defensa de los intereses superiores de México y los intereses de nuestros estados”, señaló en su intervención.
Consideró que la posición expresada por el Presidente de Estados Unidos, de aplicar aranceles a productos mexicanos, resultaría violatorio del Tratado de Libre Comercio de América del Norte vigente y de las reglas de la Organización Mundial del Comercio.
La legisladora priista aclaró que no están de acuerdo con la política migratoria actual del gobierno federal, dado que su pasividad ha generado una verdadera crisis humanitaria en el sur del país, donde familias enteras, no solamente de Sudamérica, sino incluso de África, se han internado al país por promesa de empleo y ayuda social.
Sin embargo, consideró que ello no justifica, de ninguna manera, una política de coerción económica unilateral como la que está decretando el gobierno de Estado Unidos
Iribe Gascón destacó que la frontera sur del país siempre ha sido muy “porosa”, con un tráfico muy poco controlado de personas y mercancías, por lo que es necesario tomar medidas de control más eficientes ante este incremento en el flujo migratorio.
“No existe justificación alguna para la aplicación de dichos aranceles, que causarían un grave daño a los exportadores mexicanos, pero también a los consumidores y productores estadounidenses. Se debe consolidar la ruta del diálogo respetuoso y la negociación constructiva, para resolver este conflicto.
“Los asuntos migratorios no deben contaminar y perjudicar la estrecha relación comercial que se ha consolidado entre nuestros países, y que siempre ha sido una fuente de enormes beneficios para los trabajadores, consumidores, ciudadanos y empresarios de México y Estados Unidos”, indicó.