La alcaldesa Nubia Ramos encabezó a los mil 200 jinetes
El Fuerte, Sinaloa.- El Olor de unos tamales rellenos de carne con chile despertó el apetito de los jinetes que se preparaban para participar en la II edición de la Cabalgata Rio Fuerte 2017.
Eran las 7:30 de la mañana y algunos empezaron a ensillar sus caballos mientras otros jinetes degustaban los tamales con un café escuchando el corrido de Mocorito “los caballos que corrieron”, que intepretaba la banda Tierra Elegida, el sol apenas empezaba a asomarse y los gallos anunciaban la salida.
Algunos preparaban sus enseres fuera de las cabañas del cuate Castillo, ubicadas en el vaso de la presa Miguel Hidalgo, a unos metros del espejo de agua donde pernoctaron después de trasladarse desde municipios lejanos, tambien los que llegaron de Nayarit y el sur de Sonora.
A bordo de carretera iban llegando la mayoria de entusiastas participantes que prefirieron madrugar e integrarse a la caravana al filo de las 8 de la mañana. Los adolescentes realizaron el recorrido hasta la presa desde las rancherias cercanas.
Luego de terminar el desayuno dio inicio la procesión con alrededor de 700 cabalgateros, mientras los musicos de la banda sinaloense se acomodaban en una cama baja jalada por una camioneta ganadera, ya el sol habia iluminado plenamente los caminos y veredas en la rivera del rio Fuerte.
Durante el trayecto, despues de la decima pieza musical, la banda Tierra Elegida interpreto “El tio Juan” ya para entonces el reloj marcaba las 12 medio dia y el numero de jinetes que se iban sumando a la cabalgata habia aumentado a 900.
Los jinetes encabezados por los integrantes de la asociacion de cabalgateros de El Fuerte Favian Cota, Leonel Vea Gamez, Bismark Orduño, Antonio Rojo y Ulises Urias, llegaron a un rancho seguidos por toda la caballeria para hacer una parada de una hora de descanso, los 20 jinetes que venian de Alamos llevaron a sus animales a beber agua y pasto mientras los demas escuchaban las melodias que interpretaba la banda.
La marcha se reanudó por la rivera del rio Fuerte, ya para entonces el termometro llegaba a los 40 grados centigrados con un sol que caía a plomo, era las 14:30 horas y la cabalgata enfilo por el malecon hasta hacer su arribo al parque turistico La Galera donde un grupo de mujeres preparaban chicharrones de lobina y filete de mojarra al disco.
Los cabalgateros realizaron una pausa para descansar y comer, muchos ya habían consumido unas latas de cerveza “para mitigar el intenso calor”. Los caballos comenzaron a manifestar cansancio en sus patas, también les dieron de comer su pastura mientras bebian agua del centenario rio Zuaque. Durante la comida, el numero de jinetes aumentó a mil 200, pues en esa parada de descanso tambien se integraron muchas amazonas acompañadas algunas de ellas por niños con sombrero y botas, listos para hacer el recorrido.
La alcaldesa Nubia Ramos Carbajal se puso al frente de la cabalgata encabezando el recorrido por las principales calles de la ciudad donde la gente que habia salido a las banquetas la saludaba. Al arribar al centro historico algunos turistas nacionales y extranjeros impresionados por el numero de jinetes, tomaron sus “selfies” para el recuerdo.
La caballeria y sus jinetes llegaron en una fila que parecia no tener fin a las instalaciones de la cacahuatera cerca de las 5 y media de la tarde donde estaba por iniciar el festival de rodeo que impactó a las familias asistentes por los diestros jinetes de Nayarit y Chihuahua que montaban a los briosos corceles que amenazaban con tumbarlos al suelo. Mientras algunos niños subian a unos caballos pony para un paseo, el sonido local anunciaba la presentación del payaso de rodeo.
Al caer la noche y más allá del cansancio, los mil 200 jinetes se divirtieron en el baile con causa pues los recursos de la Cabalgata Rio Fuerte 2017 se destinarán para la construccion del Centro de Equinoterapia para ayudar a niños con problema de autismo, lento aprendizaje o a quienes sufren alguna discapacidad motriz.